Hollande confiesa su admiración por Royal

Hundido en los sondeos y a 14 meses de las elecciones presidenciales, François Hollande vuelve a mostrar su faceta de hombre cercano y ciudadano “normal” en la que basó su campaña hacia el Elíseo hace cuatro años.

Aprovechando la cercanía del 8 de marzo, Día internacional de la mujer, el presidente francés ha concedido una larga entrevista en exclusiva a la revista ‘Elle’ en la que repasa el largo combate por la igualdad, denuncia la violencia machista o se extiende sobre el reto de la paridad.

También habla de su vida familiar, de las mujeres que le han marcado y de su relación con Ségolène Royal, expareja y actual ministra de Ecología con la que tiene cuatro hijos. Y no faltan los guiños políticos dirigidos al 57% de mujeres que le votó en el 2012.

“Soy feminista! Y sigo siendo socialista”, proclama. Un mensaje que dará mucho que hablar en un momento marcado por la división que vive la izquierda a cuenta de una controvertida reforma laboral o de la política antiterrorista.

Esquivando de inmediato una pregunta sobre su relación con la actriz Julie Gayet (“nuestros conciudadanos elijen un hombre o una mujer. No una pareja o una familia. Lo que significa que no tengo nada que decir sobre este asunto”, dice), Hollande se sincera sobre la etapa vivida junto a Royal.

“Como muchas mujeres, era capaz de conciliar su carrera con su vida familiar. Yo, por mi parte, hice lo que pude. Iba a la compra o cocinaba. También me ocupaba de los niños. Les contaba cuentos por las noches o los llevaba a hacer deporte. Pero si le pregunta a Ségolène Royal, imagino que diría que podía haber hecho más. Y es verdad. Lamento de verdad no haber hecho más. Compartir las tareas es una condición para la felicidad de la familia”, cuenta.

ELOGIO A MERKEL

El presidente habla de las mujeres por las que tiene admiración. Cita a Simone Veil, la ministra de Valéry Giscard d’Estaing autora de la ley del aborto o a Yvette Roudy, responsable de la primera ley sobre la igualdad profesional durante la presidencia de François Mitterrand. E incluye a la cancillera alemana, Angela Merkel, a quien ve “más feminista de lo que ella misma cree”. “Es un ejemplo de voluntad y de éxito para muchas mujeres. Probablemente le sorprenderá mi declaración”, comenta entre risas.

Hollande aprovecha para anunciar que el Gobierno prepara nuevas medidas de lucha contra la violencia machista después de señalar que “ninguna mujer debe estar sola frente al  acoso, venga de donde venga, en la oficina, en la calle o en un tren”.

Sin embargo, no se muestra partidario de un cambio legislativo que contemple la “legítima defensa permanente” reclamada por muchas asociaciones tras el caso de Jacqueline Sauvage, la mujer condenada por matar a su marido tras años de maltrato e indultada recientemente por decisión presidencial.

El dirigente sale también al paso de la polémica creada por el nombre del nuevo Ministerio de la Familia, la Infancia y los Derechos de las Mujeres, alegando que no hay que dejar a la derecha la exclusiva de este asunto. No obstante, avanza que la cartera pasará a llamarse “Ministerio de las Familias”, para incluir a las monoparentales y a las del mismo sexo.  

Tras repasar la larga batalla por los derechos de las mujeres librada por su generación, sostiene que el lugar que ocupan las mujeres en una sociedad es “un indicador del estado de un país, de su madurez democrática y de su modernización económica”.

Aunque al final de la entrevista, al hablar de la paridad, no tiene más remedio que admitir la dificultad que todavía tienen las mujeres para ocupar la cúpula del poder. ¿Cuántas mujeres hay a la cabeza de empresas que cotizan en el CAC 40 (el índice de la Bolsa de París)?, le preguntan. “Ya conoce la respuesta: Ninguna!”.

Ningún presidente en el cargo, desde François Mitterrand en 1984, se había librado a un ejercicio similar en la revista, una iniciativa que en el Elíseo defienden para multiplicar los canales de difusión y llegar a un público más amplio.