Graves disturbios marcan la toma de posesión de Putin

La investidura del hombre fuerte de Rusia, Vladímir Putin, como nuevo presidente de la Federación fue ensombrecida ayer por protestas masivas, violentos enfrentamientos con la policía y numerosas detenciones en Moscú. La policía rusa detuvo en el centro de la capital rusa a un centenar de activistas opositores, que organizaron una protesta con motivo de la ceremonia. Esos manifestantes arrestados se sumaron a los más de 400 detenidos el domingo pasado durante la denominadaMarcha de los Millones,que reunió a 100.000 personas que exigían una «Rusia sin Putin».

Según algunos testigos, los agentes detuvieron ayer no solo a los manifestantes, sino a todo aquel peatón que se encontraba a su lado. Entre otros, arrestaron a varios clientes de un café con terraza a cielo abierto que se halla cerca al lugar donde se congregaron los opositores.

En vísperas de la investidura de Putin, la policía aplastó violentamente la manifestación de la oposición. Los agentes golpearon a los manifestantes y detuvieron a los líderes de la oposición Serguei Udaltsov, el bloguista anticorrupción Alexey Navalny y al exviceprimer ministro Boris Nemtsov. Unos 30 policías resultaron heridos en los incidentes.

3.000 INVITADOS/ Putin, que ocupaba el cargo de primer ministro después de haber sido presidente desde el 2000 al 2008, sucedió oficialmente a su colaborador Dmitri Medvédev durante una ceremonia en el Kremlin ante unos 3.000 invitados. Entre ellos, se encontraban el patriarca de la iglesia ortodoxa rusa, Kirill, el gran rabino Berl Lazar, el exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi, el expresidente soviético Mijail Gorbachov y el excanciller Gerhard Schröder.

«Hoy entramos en una nueva etapa del desarrollo nacional. Los próximos años serán determinantes para el destino de Rusia en las décadas futuras», dijo Putin en un breve discurso. El nuevo presidente fue elegido el 4 de marzo con un 64% de los votos mediante unos comicios marcados por las denuncias de fraude por parte de la oposición. El tercer mandato tras la reforma constitucional será de seis años. Después de su investidura, Putin propuso al Parlamento la candidatura de su predecesor, Dmitri Medvédev, para el cargo de primer ministro.

Para garantizar la seguridad de Putin, los servicios especiales vaciaron el centro de la capital rusa, lo que provocó que no hubiera ni una sola persona que saliera a saludar el cortejo presidencial. En medio de este clima de tensión, un impresionante dispositivo de seguridad cercó los alrededores del Kremlin.

Mientras, la policía abrió una investigación contra los detenidos a los que acusó de delitos castigados con entre 3 y 10 años de cárcel.