EEUU e Irán inician el deshielo con un encuentro histórico en la ONU

Los máximos representantes de las diplomacias de EEUU e Irán, John Kerry y Mohamed Javad Zarif, ayer durante su histórico encuentro

Los máximos representantes de las diplomacias de EEUU e Irán, John Kerry y Mohamed Javad Zarif, ayer durante su histórico encuentro / periodico

IDOYA NOAIN / Nueva York

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El deshielo ha comenzado. Ayer, en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, y por primera vez en 34 años, los máximos responsables de la política exterior de Estados Unidos e Irán se reunieron cara a cara para abordar su relación. El breve encuentro personal de John Kerry y Mohamed Javad Zarif, los enviados de Barack Obama y Hassan Rohani, llegó tras una reunión multilateral de una hora en la que participaron también Francia, el Reino Unido, China, Rusia, Alemania y la Unión Europea. En ese encuentro se empezó a diseñar un nuevo camino para negociar con Teherán sobre el programa nuclear y las sanciones. Y ya hay fijada fecha y próxima parada: una reunión el 15 y 16 de octubre en Ginebra.

La multilateral fue alabada por todos los participantes. "Extremadamente buena" y "un buen principio", dijo William Hague, ministro de Exteriores del Reino Unido. "Sustanciosa" y "energética", añadió Catherine Ashton, la representante de la UE. Y todos, incluyendo Kerry y Zarif, coincidieron en que se produjo con "un tono, una atmósfera y unas posibilidades" muy distintas a negociaciones multilaterales anteriores.

"Una reunión y un cambio de tono no contesta a todas las preguntas y queda mucho trabajo", dijo Kerry, que definió su encuentro con su homólogo iraní como una reunión para "explorar un poco más las posibilidades". El ministro de Exteriores iraní, por su parte, se mostró también "satisfecho" de la breve reunión y añadió: "Tenemos que ver si podemos emparejar las palabras positivas con acciones serias".

METAS

La meta con la que Irán llega a las negociaciones, según Zarif, es que se levanten completamente "todas las sanciones", que calificó de "contraproducentes" y "sin fundamento en el derecho internacional". "Esperamos movernos en esa dirección en poco tiempo", concluyó.

 Mientras, el resto de países mantienen la meta de garantizar que Teherán no desarrolla armas nucleares. De lo que no se dio información ayer es sobre si se permitirá a Irán mantener el enriquecimiento de uranio al 5% que le permitiría desarrollar energía nuclear para uso civil. Como dijo el ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, "el diablo está en los detalles y es importante tener negociaciones serias muy pronto".

El calendario que han pactado es muy "ambicioso" según anunció Ashton, aunque admitió también que "hay que ser muy práctico en la traducción de las ambiciones a lo que se puede hacer".

La comunidad internacional emprende así un nuevo intento de acabar con los miedos a un Irán nuclear. Teherán, por su parte, intenta salir de la asfixia económica y el aislamiento. Y el paso es histórico para EEUU e Irán, con relaciones siempre difíciles y prácticamente congeladas desde la crisis de los rehenes de 1979.