Estrategia antiterrorista

Alemania abre la puerta a cooperar con Al Asad

La cancillera alemana Angela Merkel con la ministra de Defensa, Ursula Von der Leyen, en el Parlamento.

La cancillera alemana Angela Merkel con la ministra de Defensa, Ursula Von der Leyen, en el Parlamento. / periodico

CARLES PLANAS BOU / BERLÍN

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Poco a poco Alemania va mostrando sus cartas. La presión ejercida por Francia para que Berlín se una más activamente al frente global contra el terrorismo parece haber surtido efecto y ahora incluso se abre la puerta a colaborar con Bachar Al Asad. Así lo confirmó ayer la ministra de Defensa alemana Ursula von der Leyen. “Hay tropas de su Ejército que irían muy bien para la misión, como ya se comprobó en sus tareas para entrenar tropas locales en Irak”, aseguró la cristianodemócrata en una entrevista en la cadena de televisión ZDF.

A pesar de ese gesto a favor de una mayor cooperación con Damasco, Alemania ha mantenido firme su decisión de no incluir en sus planes de transición al dirigente sirio. “No hay futuro con Al Asad, eso seguro”, insistió Von der Leyen. Después de los sangrientos atentados yihadistas de París, que se cobraron 130 vidas, el liderazgo del autócrata alauí parece haber quedado relegado a un segundo plano y ser considerado un mal menor. “Hay que revaluar que pasa con Al Asad cuando empiece la primera fase de transición”, añadió. Hasta entonces utilizar las tropas leales al dictador parece cada vez una opción más viable.

El anuncio de una posible cooperación supone un importante giro en la implicación alemana en la guerra de Siria, que hasta ahora se había limitado al apoyo logístico. “Al Asad no es una solución por la que se pueda apostar”, sentenció el ministro de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, el pasado 6 de noviembre. Ahora Alemania se acerca parcialmente a la estrategia de Francia, los primeros en valorar explícitamente la participación del Ejército sirio. Damasco recibió esa posibilidad con los brazos abiertos. Las palabras de Von der Leyen se entienden como un intento de hacer equilibrios entre su posición original y la petición de ayuda de sus vecinos.

El eje francoalemán disgusta a Obama

Después de los ataques a la capital gala, el presidente de la República, François Hollande, se ha embarcado en una carrera diplomática para convencer a diversos líderes mundiales de una mayor participación contra el Daesh. Quien ya mostró su negativa fue el presidente estadounidense Barack Obama. Las intenciones de Francia y Alemania chocan directamente con los intereses de Washington, que ha reiterado desde el inicio de la guerra civil que la solución pasa por tumbar a Al Asad y se niegan a cooperar con él. El disgusto de Estados Unidos es doble porque la opción que ahora estudia el eje francoalemán va en la línea de lo que quiere Moscú.

El estado de alerta y nerviosismo que se ha vivido en Francia y Bélgica ha llevado a la cancillera Angela Merkel a endurecer su posición. El miércoles Berlín anunció el envío de 650 soldados a Malí para permitir a los galos centrar su acción militar en Siria y el domingo el jefe del ejército, Volker Wieker, precisó que se necesitarían hasta 1.200 militares en Oriente Medio para participar en las misiones de reconocimiento. La implicación alemana también incluye seis aviones de reconocimiento Tornado y un buque de guerra enviado para defender al portaaviones francés Charles de Gaulle.