Chanel se lanza al espacio

Un supermercado de lujo. Un centro de datos. Un aeropuerto. Un iceberg. Cada puesta en escena en los desfiles de Chanel es un nuevo reto. Y este martes no ha sido diferente. Karld Lagerfeld ha colocado en el centro del Grand Palais de París un cohete espacial. Un despege desde el centro de control número 5, para mostrar su colección 'prêt-à-porter' del próximo otoño-invierno, con invitados como Cara Delevingne (ahora de rubia platino), Vanessa Paradis y su hija la modelo Lily-Rose Depp, Lottie Moss (la hermana de Kate Moss), la directora Sofia Coppola, la coreógrafa Blanca Li, la cantante inglesa Lily Allen o el cantante norteamericano Pharell Williams y la editora Anne Wintour, entre otros.

El protagonista ha sido el cohete espacial de PVC de 37 metros de altura que incluso, entre una humareda, se ha elevado unos metros al final del 'show' mientras sonaban los acordes de 'Rocket man' de Elton Jhon. El mensaje no podía ser más claro: Chanel no tiene suficiente con la Tierra; también quiere conquistar el firmamento.

Por eso la pasarela se ha llenado de conjuntos muy Chanel, el mismo 'tweed' de siempre, pero con aspecto metalizado, con estampados de estrellas, constelaciones, lunas y astronautas. También se han visto abrigos y chaquetas metálicos realizados con material térmico, cuellos que recuerdan al cierre de la escafandra del uniforme espacial e incluso acolchados que recuerdan la orografía de la Luna. Los broches y adornos, incluso las amplias gafas pantalla también parecían salidas del ropero de una megapija sideral.

Y es que después de los robots de la temporada anterior, Lagerfeld sigue apostando por el futuro y la tecnología como hilo conductor de sus propuestas.