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Òscar Bardají: «La gente se descarga nuestro 'podcast' de laudes»

Este periodista dirige una radio donde en vez de tertulias políticas se retransmiten oficios divinos locutados por monjes

Òscar Bardají, responsable de Montserrat Radio, en el monasterio.

Òscar Bardají, responsable de Montserrat Radio, en el monasterio. / Marc vila

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Manuel Arenas
Manuel Arenas

Redactor y coordinador del equipo de información del área metropolitana de Barcelona

Especialista en historias locales, audiencias e información del área metropolitana de Barcelona y reporterismo social

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Uno piensa en radio y le viene a la cabeza música comercial, tertulias políticas o retransmisiones deportivas. Si bien hay radios de otros mundos que habitan en este, como la que dirige el periodista Òscar Bardají (Barcelona, 1970) en la abadía de Montserrat. Allí el plató es un presbiterio, los comentaristas son los propios monjes de la comunidad y los equipos técnicos están incrustados en una arquitectura a caballo entre lo gótico y lo renacentista. La vida moderna es escuchar en podcast los oficios divinos.

-¿Cómo empezó a dirigir 'Montserrat Ràdio'

-Soy director de comunicación de la abadía de Montserrat desde el 2000, pero hasta el 2010 no empezamos las retransmisiones de radio y tele. El proyecto tiró hacia adelante porque la comunidad quiso invertir en el poder evangelizador de los medios. Antes, había trabajado en el periodismo deportivo, pues era árbitro de baloncesto.

-Qué cambio. ¿Se lo imaginaba cuando estudiaba?

-No, claro que no, pero la vida te lleva. Llámale providencia. Es cierto que sí había tenido contacto con el mundo religioso en Ràdio Estel y en la hoja dominical del Arzobispado de Barcelona.

-¿Hay que ser religioso para trabajar en Montserrat?

-Esto es como ser del Barça y trabajar para el Madrid: por mucho dinero que te den, no vas a ser feliz. Tienes que creértelo; yo soy creyente, he de comulgar con lo que pasa dentro.

-¿Cómo funcionan internamente?

-Somos tres: el hermano Antón Gordillo, responsable técnico y de emisiones; Gemma Motger, en edición y posproducción; y yo, director. Funcionamos como una radio y televisión local más: tenemos nuestros equipos técnicos y 8 cámaras fijas en la basílica, desde donde damos un servicio 24 horas con música armoniosa y programas. Hacemos conexiones en directo en misas y oficios: unas dos horas diarias en radio y unas tres en TV.

-¿Cuál es su trabajo concreto en la radio y la TV?

-Decido sobre el contenido y programación de la emisora y soy la voz informativa de las videonoticias y contenidos que generamos para nuestra web. Por ejemplo, hace semanas vino el president de la Generalitat y yo le hice una entrevista breve. Los actos religiosos, sin embargo, son locutados por los propios monjes, que son quienes tienes formación teológica y musical.

-Entiendo que las decisiones últimas recaen en los monjes. Debe ser difícil conjugar eso con su criterio periodístico.

-Sí, pero con los años lo ves de otra manera. Al comienzo me generaba más enfados, pero con los años entiendes ese 'no' a propuestas que tus jefes ven diferente. Al final, el abad está al frente de la comunidad benedictina y es el responsable máximo de todo lo que ocurre en Montserrat, radio y TV incluidas.

-Antes tenían frecuencia en la FM, ¿verdad?

-Sí, pero era muy reducida y lo que nos da la vida a nosotros es internet. Sobre todo los podcasts: la gente se descarga los oficios de laudes o nuestros programas, especialmente cuando no puede escucharlos en directo.

-¿Qué tipo de audiencia tienen?

-Aunque no hemos hecho estudios de audiencia, nuestro perfil de público son personas de edad madura, de más de 45 años, a las que les gusta la liturgia de Montserrat. Aproximadamente tenemos unos 800 clics diarios, y en festividades podemos llegar a los 5.000.

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-¿Tienen algún proyecto a corto plazo?

-Nos gustaría incorporar algún programa sobre cuentos infantiles, una área muy potente. Al no ser una radio al uso, tenemos una voluntad de servicio con valores cristianos clara. En Montserrat siempre ha habido tradición de pensar en los medios de comunicación.