Gemma Prenafeta: "Conectamos a gente que quiere hacer actividades"

Londres. Verano del 2014. Gemma Prenafeta (Lleida, 1995) estaba en tercer curso de Negocios y Marketing Internacional (ESCI-UPF) y quiso dedicar sus vacaciones a reforzar su inglés. Voló a la capital británica y repartió currículums. Cinco días después, ya trabajaba de recepcionista en un restaurante, en Piccadilly Circus. Tocada por la música desde niña –el compositor de sardanas Josep Prenafeta, cuyo nombre bautizó la plaza del Auditori de Lleida, era primo de su padre–, creció aprendiendo a tocar el violín y el piano. Y a disfrutar de la cultura. Pero, al acabar su jornada laboral en ese Londres tan bullente de actividad, ¿Dónde ir? ¿Con quién? 

 

–¿Allí y así nació su idea de la app Sharify?Sí. Con los compañeros del trabajo siempre acabábamos tomando una cerveza al salir del restaurante, pero yo sentía que en aquella ciudad podíamos hacer mucho más, y que seguro que había más gente con quien podíamos compartir aquella cerveza o alguna otra actividad. Pero yo me preguntaba: ¿Cómo saber aquí cerca y ahora qué puedo hacer y con quién más? Pensé que sería ideal que con una app lo supiera al momento.

 

–¿Cómo ha llegado a crearla?Con esa idea regresé de Londres y dediqué a ello mi trabajo de carrera. Tuve mucha suerte con los mentores que tuve. Mi profesor Christian Rovira, que es director de Comunicación de la escuela ESCI-UPF, y luego Jordi Priu, fundador y CEO de 101 Startups –inversores en empresas de internet y aplicaciones móviles–, y Andrea Gamero, Global Brand Lead de Google fueron grandes ayudas una vez decidí desarrollar la aplicación que desde ayer está disponible para Android y iOS ().

 

–¿Cómo funciona? Cualquiera puede crear una actividad en Barcelona o donde sea, la app está activa desde cualquier lugar del mundo. Y en un mapa de la ciudad o el lugar que sea, aparece todo lo que está programado ahora y en las próximas horas. Todo es muy visual y en tiempo real: una barra del tiempo con las 24 horas sobre la que eliges la hora que tienes libre y cinco emoticones que te llevan al tipo de actividad que prefieres: cerveza; música; deporte; café o naturaleza.

 

–¿Quién paga la app y su sustento?Fuimos una de las 10 startups seleccionadas para la preencubadora de Barcelona Activa. Eso ya nos ayudó mucho. Con un programador de Lleida, Diego Gaspar, al que reencontré gracias a Facebook porque habíamos estudiado juntos en nuestra ciudad, empezamos a diseñar la aplicación. Y en una primera ronda de financiación obtuvimos 50.000 euros para hacerla. Ahora ya somos cuatro ingenieros y yo en el proyecto y en junio ampliaremos la plantilla.

 

–¿Es gratuita para los usuarios?Sí, porque el objetivo que nos mueve es conectar a gente que quiere hacer cosas, poner en valor el concepto de (compartir), que sea realmente una red social de verdad, donde la gente se encuentra en persona y comparte actividades. La vía para monetizarla es aprovechar que los negocios también organizan actos, lanzamientos de producto y ofertas y trabajar a partir de ello, pero no hacer pagar al usuario.

 

–Vivimos ya en la era del sharingEn mis viajes entre Barcelona y Lleida siempre uso Blablacar. Hoy lo tenemos todo a mano, con servicios como Glovo, Deliveroo..., pero echaba en falta uno para compartir actividades a tiempo real, un concierto o un partido de fútbol, una cerveza o una obra de teatro, entrar web por web de cada teatro es un rollo, y en Sharify puedes compartir con gente conocida o no, la app está ya en castellano y en inglés, es una red social que socializa de verdad.

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–Y la música, ¿dónde la dejó? La música me ha guiado también en esto. Nuestra app es una herramienta más para dar a conocer y asistir a los conciertos.