Tres empresas ganan la primera subasta eólica en casi 4 años

Jorge Energy, firma del grupo porcino aragonés Jorge; Energías Eólicas de Aragón, del grupo Forestalia; y la portuguesa EDP se han adjudicado la primera subasta de potencia eólica en casi cuatro años, que acaba con la 'moratoria verde' decretada por el Gobierno del PP, con un total de 500 megawatios (MW). Lo llamativo de la puja es que los ganadores no recibirán ningún incentivo a la producción, ya que la presión competitiva ha hecho que estos bajaran hasta cero, según fuentes del sector. Eso significa que los productores deberán vender la energía al precio de mercado, sin primas ni incentivos adicionales.  

También se adjudicaron otros 200 MW de biomasa entre la aragonesa Forestalia (160 MW), que es la propietaria de Energías Eólicas de Aragón; y la fabricante de celulosa Ence (40%). Ninguna de las grandes eléctricas ha logrado ni un solo MW, ni otras compañías destacadas en el ramo de las energías renovables. Acciona, en la cabeza del sector, no ha presentado oferta en este concurso.

En biomasa, la potencia ganada por Forestalia la desarrollará el gigante energético chino Gedi (Guandong Electric Power), según acuerdo al que han llegado, informa Europa Press. Se da la circunstancia de que el presidente de este grupo, Fernando Samper, es hermano del máximo directivo de Grupo Jorge, pero no existe ninguna relación empresarial entre ellos. 

En el apartado eólico se han presentado ofertas que han llegado a 2.000 MW, cinco veces la cantidad en juego. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha validado la licitación.

Fuentes del sector consideran que el resultado de la subasta "demuestra que el mecanismo funciona". Los ganadores deben depositar una fianza y comprometerse a tener las plantas operativas en unos dos años.

SIN SOBRECOSTE, PERO SINGULAR

De todas formas, que esta puja haya culminado sin ningún sobrecoste para el sistema eléctrico no presupone que las futuras que se lleven a cabo tengan el mismo resultado. Por lo tanto debe considerarse como singular. En esta ocasión, han ganado "los mejores emplazamientos" y aquellos que ya tienen permisos y trámites avanzados, que compensan no tener incentivos a la inversión, según fuentes del sector. Además es la primera oportunidad de nuevas insalaciones en casi cuatro años.

Si en el caso de la eólica no habrá retribución a la inversión para los adjudicatarios, en el de biomasa esta también será cero, pero habrá una retribución a la operación.

En el sector había mucho interés por la subasta. Es la primera subasta y, a la vez, una oportunidad de poner en marcha nuevas instalaciones renovables tras casi cuatro años de paralización en el desarrollo de nuevos proyectos con derecho a incentivo. El objetivo es sumar más potencia eólica para cumplir los objetivos europeos para el 2020.