JUICIO EN LA AUDIENCIA

Todó elevó su salario el 30% al fichar por Caixa Catalunya

Adolf Todó, exdirector general de Caixa Catalunya, declara en la Audiencia de Barcelona.

Adolf Todó, exdirector general de Caixa Catalunya, declara en la Audiencia de Barcelona. / periodico

Eduardo López Alonso / Barcelona

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El exdirector general de Caixa Catalunya Adolf Todó reconoció este martes en la Audiencia de Barcelona que al pasar de Caixa Manresa a Caixa Catalunya incrementó su salario un 30%. El exdirectivo defendió su gestión y recordó que la entidad creció durante tres trimestres consecutivos: "Yo no era un kamikaze, yo no me hubiera comprometido con un proyecto profesional que no fuera a ser viable", afirmó Todó.

El juicio a la excúpula de Caixa Catalunya ha continuado este martes en la Audiencia de Barcelona con la declaración de Todó como principal protagonista de la vista. Además de Todó, están en el banquillo de los acusados el expresidente de la entidad Narcís Serra y otros 39 exdirectivos y consejeros. Están imputados por el incremento de sueldos en plena crisis financiera, entre el 2009 y el 2012. El FROB salió al rescate de la entidad con 12.000 millones de euros en esos años y la plantilla se redujo en 1.600 trabajadores. 

Participación en los consejos

El fiscal Fernando Maldonado ha destacado la falta de transparencia sobre las alzas salariales de Todó y la lentitud a la hora de informar al Banco de España de esos incrementos. Todó recordó que los inspectores del Banco de España estaban físicamente en la entidad y el acta de la comisión de retribuciones estaba disponible para ellos. El directivo aseguró que no estuvo presente en la comisión de retribuciones que decidió incrementar sus incrementos salariales, aunque en declaraciones preliminares de la fase de instrucción sí reconoció haber estado en ellas. La participación activa en la reunión es relevante, ya que el hecho de abstenerse en la votación o no haber participado en la discusión de sus propias retribuciones rebajaría su responsabilidad.

En las reuniones de enero y octubre del 2010 no figura esa ausencia en el acta, aunque Todó asegura que no estaba. Sin embargo en una reunión del 2011 sí que se reflejó en el acta su ausencia.

En su declaración ante el tribunal, Todó ha hecho hincapié en ese cambio del testimonio que prestó en la fase de instrucción y ha asegurado que, tras haber repasado lo sucedido con el expresidente de la entidad Narcís Serra y con el exdirectivo Jaume Massana, ambos le "hicieron recordar" que al empezar a hablar de su aumento de sueldo, el propio Serra le pidió que abandonara la sala, y que, cuando le mandaron volver a la reunión, el aumento salarial ya se había "aprobado". En aquella reunión se acordó aumentar el sueldo fijo de Adolf Todó en 100.000 euros -de 700.000 a 800.000 euros- y su variable del 35 al 50 %.

Todó, que fichó como director general de la entidad en el 2008 procedente de Caixa Manresa, sí que ha admitido ante el fiscal haber participado en la votación en la que se acordó la segunda subida salarial por la que se le juzga, la aprobada en la reunión del consejo de administración del 13 de octubre, meses después de que el FROB inyectara 1.250 millones de euros en la entidad. En aquella convocatoria se acordó un incremento salarial de unos 12.000 euros en su salario fijo, hasta fijarlo en los 812.501 euros, un incremento del 1,5 % justificado por el aumento del IPC y aplicado a todo el resto del personal de la entidad. Cuando el fiscal le ha reprochado que participara de aquella segunda votación, a pesar de que por normativa interna debía ausentarse, Todó le ha replicado que el consejo acordó en diciembre del 2011 aumentar las retribuciones a los consejeros en un 80% en presencia de los representantes del FROB, que votaron a favor.

Retribución

Todó ha esgrimido durante el juicio que su salario era en torno a un 18% más bajo que la media del sector financiero, por lo que los expertos aconsejaban elevar la retribución fija hasta la media. El fiscal ha replicado que el salario estaba por encima de lo habitual entre las cajas catalanas, a lo que Todó ha explicado que esa media de las cajas catalanas incluía entidades mucho más pequeñas que Caixa Catalunya. Sobre los pagos variables, Todó ha defendido que siempre estuvieron en el marco de lo habitual en el sector.

A preguntas de la abogada del Estado, Todó ha asegurado que se hubiese rebajado el salario si lo hubiese pedido el Banco de España, pero no lo hizo pese a la petición de algunos consejeros de la entidad ante el deterioro de las cuentas de la caja. Todó no ha querido responder a las preguntas de la abogada de la CUP.

Todó, que fue despedido en el 2013 de su puesto, aseguró que en ningún caso el FROB aludió a sus retribuciones como causa de la rescisión laboral. El despido fue ratificado legalmente como improcedente. 

Gestión

Durante la sesión, Todó defendió la gestión de Caixa Catalunya y recordó que lo más relevante es que el Banco de España la avaló y determinó que la entidad "era sólida" y no presentaba debilidades que impidiese su viabilidad futura. 

En las sesiones anteriores del juicio, la Audiencia de Barcelona rebajó las fianzas impuestas en su momento al aceptar la petición de los abogados de la defensa y redujo la fianza de 9,5 millones de euros a 2,56 millones. Esta fianza se fija en concepto de responsabilidad civil solidaria con los miembros del consejo de administración, que dieron el visto bueno a este incremento salarial.

Pagos y perjuicios

Entre otras decisiones bajo investigación, está el pago a Todó de una retribución fija anual de 600.000 euros --que luego incluso se aumentó-- a lo que había que sumar una retribución variable del 35% del total, condicionada al cumplimiento de objetivos. Se estableció para él una cláusula de prejubilación a partir de los 60 años por la que cobraría hasta los 67 una renta mensual del 90% de su sueldo, y a partir de los 67 "una renta vitalicia" del 80% de lo recibido los 12 meses anteriores. Otra cláusula establecía que, en caso de morir, su hija podría recibir una pensión vitalicia por el 50% de la retribución cobrada por Todó los últimos doce meses. En total, Todó percibió más de cuatro millones de euros entre 2008 y 2012 --sumando las retribuciones fijas y las variables-- a lo que hay que añadir aportaciones al plan de pensiones. Según el Banco de España, las decisiones del consejo de administración de Caixa Catalunya supusieron un perjuicio económico de entre 1,31 y 1,45 millones en favor de Todó. El fiscal ya recordó que la normativa del FROB para rescatar a los bancos exigía la "racionalización de estructuras de administración y gerencia" y "ajustar las políticas de retribución de los altos directivos" en la normativa europea.

Los beneficios de Caixa Catalunya se redujeron los 493 millones de euros del 2007, los 185 del 2008 y los 77 del 2009. En enero del 2008 Todó fue nombrado director general y en marzo Jaume Massana fue designado director general adjunto. El sueldo fijo de Todó era de 600.000 euros anuales, con un variable del 35% si se cumplían el 60% de los objetivos, con tres anualidades de indemnización en caso de rescisión anticipada del contrato y otras dos por no competencia poscontractual. Además, de los 60 a los 67 años de edad se podía prejubilar con el 90% del sueldo fijo, y a partir de los 67 años con una renta vitalicia del 80%, más de 4 millones de euros en aportaciones a los planes de pensiones, 3,9 millones de un fondo interno y 8,2 millones de provisiones matemáticas. Solo con sueldo fijo y variable cobró 4 millones entre el 2008 y el 2012, más casi dos millones en el fondo de pensiones, según la Fiscalía.