PROTECCIÓN SOCIAL

Un respiro para las pensiones

Oficinas de la Seguridad Social en Cornellà.

Oficinas de la Seguridad Social en Cornellà. / periodico

Antoni Fuentes / Barcelona

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Por fin buenas noticias para el sistema público de pensiones. Después de sufrir con dureza las consecuencias de la crisis, la Seguridad Social registró en junio el primer respiro en sus cuentas desde que empezó la crisis. El déficit de la Seguridad Social disminuyó en 1.000 millones respecto al primer trimestre de este año y se quedó en 18.321 millones de euros.

El desequilibrio entre los ingresos y los gastos del sistema público de pensiones fue engordando durante la crisis hasta alcanzar un máximo de déficit que se acercó a los 20.000 millones de euros y el 2% del producto interior bruto (PIB). Con el descenso registrado en el segundo trimestre del 2017, el déficit se ha quedado en el 1,68% del PIB debido a la mejora de las cuentas de la Seguridad Social y al incremento de la actividad económica.  

Con la hucha agotada

Se trata del primer descenso del déficit en términos absolutos desde que empezó el deterioro del mercado laboral y de la Seguridad Social, según confirma Enrique Devesa, profesor de la Universitat de València y uno de los expertos que asesoró al Ministerio de Empleo en la última gran reforma del sistema de pensiones. La mejora llega en un año en el que el Gobierno se ha visto obligado a emitir deuda pública para cubrir el déficit de las pensiones debido al agotamiento del Fondo de Reserva, la hucha.

Los cálculos realizados por el Grupo de Investigación en Pensiones y Protección Social en el que participa Enrique Devesa están basados en los datos económicos de la Seguridad Social. En 12 meses, se redujo por primera vez la distancia entre los ingresos del sistema de pensiones, que crecieron en 1.974 millones y sumaron 125.499 millones de euros, y los gastos, que subieron en 902 millones y llegaron a 143.819 millones. 

Los datos de ejecución presupuestaria de la Seguridad Social publicados por el Ministerio de Empleo también muestran una mejora respecto al 2016, con un saldo de caja positivo de 2.565 millones frente a los 2.185 de la primera mitad del año pasado. 

Las claves de la mejora

La mejora de las cuentas también se aprecia en el indicador del déficit contributivo, que excluye de los cálculos las transferencias internas y del Estado, y que se situó en 19.127 millones, lo que supone 368 millones menos.  

Las claves del respiro de la Seguridad Social son la mejora de la economía, el crecimiento del empleo y el ahorro en algunas partidas. El volumen de las cotizaciones creció hasta junio a un ritmo del 1,4%, el más intenso desde que se empezó a reducir el paro en el 2014. Además, la cotización media por ocupado subió un 0,62%, algo que el estudio considera como "el hecho más destacado de la evolución de los ingresos" y que atribuye al final de las tarifas planas de cotización y de mínimos exentos para algunos colectivos de trabajadores así como al aumento de las bases mínimas de cotización en un 8% tras la subida del salario mínimo interprofesonal (SMI) y de la base máxima de cotización en un 3%.

Efectos de las reformas

"El crecimiento económico, que primero afectó al número de afiliados, se está trasladando ahora a los salarios y bases de cotización", indican Devesa y el resto de expertos que han elaborado el informe. Sin embargo, Devesa reconoce que la precariedad de los contratos laboralesprecariedad  frena el potencial de recuperación de los ingresos por cotizaciones.

En el capítulo del gasto en pensiones, el estudio destaca que las medidas de reforma, como la de una revalorización mínima del 0,25%, han contribuído a moderar el crecimiento de la factura. A la vista de la evolución de la Seguridad Social hasta la primera mitad del año, los expertos prevén que se intensifique la mejora a final del 2017 aunque advierte de que el progreso es "todavía insuficiente para que se pueda hablar de una tendencia al equilibrio".

Pero la mejora no permitirá cerrar el año con el déficit previsto por el Gobierno en los Presupuestos Generales del Estado de 16.679 millones debido a la desviación entre el aumento de los ingresos por cotizaciones contabilizado en las cuentas públicas, que es del 6,8%, y la realidad, que es del 4,9%. A pesar de ello, el Ministerio de Empleo subraya que se trata de "un ritmo de crecimiento desconocido en los últimos ocho años".