El paquete marca el producto

Toda la industria que se dedica a las diferentes formas de empaquetar se ha dado cita esta semana en el salón Hispack de Fira de Barcelona que se celebra hasta este viernes en el recinto de Gran Via y en el que se ha hecho evidente que el 'packaging' ha pasado de ser un elemento marginal de un producto a convertirse en estratégico. El paquete marca el producto, define sus características, atrae al consumidor final tanto o más que incluso el contenido del interior. Además, con la eclosión del comercio electrónico y los nuevos hábitos de consumo el embalaje se ha convertido en una pieza clave del proceso desde el inicio de la producción hasta el usuario.

Estas son algunas razones que explican porque un salón tan especializado como el Hispack se haya convertido este año en el tercero en importancia de los que se celebran en la feria barcelonesa, solo superado por Alimentaria y el Mobile World Congress. Hispack es una feria de carácter industrial, totalmente dedicada a profesionales, que se celebra cada tres años. Desde el anterior salón, los organizadores han preparado la muestra a partir de las nuevas tendencias que se han ido consolidando en estos años y que marcan diferencias incluso en tan escaso periodo de tiempo.

El director de Hispack, Xavier Pascual, explica que hay cuatro elementos que marcan el sector en estos  momentos. "En primer lugar, la digitalización y la automatización de los procesos", la industria 4.0 aplicada también al packaging. La segunda tendencia es la apuesta "por la sostenibilidad", tanto de la industria en general, como en la adaptación de la fase final de los paquetes para que sean más fácilmente reciclables y más eficientes. Un tercer factor es "el packaging logístico", muy vinculado al comercio electrónico, que "ha de permitir muchos viajes de ida y vuelta del producto, para atender a las devoluciones, por ejemplo". Y la cuarta tendencia es la que se ha calificado como "experiencia de uso", en la que el paquete se convierte en un reclamo imprescindible en los lineales de los súpers pero también en casa del usuario donde debe pasar la difícil prueba de una buena estanqueidad, la facilidad de abrir y cerrar, reciclable.. "Una serie de factores que pueden hacer que si la experiencia es buena, el consumidor repita la compra", racalca Pascual.

Se añade aún una quinta tendencia que es la del nuevo papel del 'packaging' en la lucha contra el desperdicio alimentario, con envases que sirven para alargar la vida de los productos u otros con un etiquetaje especial que va variando de color a medida que se acerca la fecha de caducidad, por ejemplo.

Todos estos cambios se han podido ver esta semana en el salón de Fira de Barcelona. Había redes para frutas y hortalizas hechas con fécula de patata y maíz, desarrolladas por Eurocat; o envases de un solo material para facilitar al máximo el reciclaje, como el realizado por Emplater con un envase 'petfull' hecho totalmente de poliester. O los envases activos de Itene, que alargan la vida de los alimentos, o la unión de esta empresa y Chimigraf que han desarollado una etiqueta que indica el estado de la carne de pollo y avisa de de si es apta para comer o no. Estos ejemplos dan la razón al presidente del salón, Javier Riera-Marsá, cuando afirma que "el packaging puede ser un elemento clave en la nueva industria para el control y la gestión de todo el proceso, desde la fabricación del producto hasta que llega al punto de venta".

Las cifras del salón son también un reflejo del auge de esta actividad: se espera que este viernes se cierre con un total de 38.000 visitantes, un 20% más de expositores que en la anterior edición, hasta superar las 1.100, de las que más del 25% son internacionales.