La industria catalana crece pese a la caída de la inversión extranjera

La industria catalana va bien. Es el mensaje que este lunes quiso transmitir el Govern a través de la Consellería del ramo y su titular Àngels Chacón, con más datos que análisis y más relevancia a los meses pasados que a los que tienen que venir. Y es que la ocupación industrial aumentó el 2,9% en el 2017, lo que supuso el cuarto año consecutivo de crecimiento y el ritmo más alto desde antes de la crisis, en lo que se describe como fase expansiva y de crecimiento. Esta es una de las principales conclusiones del 'Informe Anual sobre la Industria en Cataluña 2017' que han presentado este lunes la 'consellera' de Empresa y Coneixement, Ángeles Chacón, y la directora general de Industria, Matilde Villarroya. Para Chacón y Villarroya, el desplome de la inversión extranjera del 39,8% en Catalunya el pasado año fue coyuntural y pasajera, y la debacle de la caída del 64,2% en el primer trimestre un dato a excluir del análisis global por no mostrar la realidad de la tendencia. Esos datos, que corrigen la información aportada en la anterior comparecencia de la 'consellera', muestran la pugna por minimizar los indicadores preocupantes y el ánimo de ensalzar los esperanzadores. 

Indicadores

Según el Anuario, las exportaciones crecieron al ritmo más alto desde el 2011 y el Índice de Producción Industrial registró la tasa más elevada desde el 2010. El peso de la industria sobre el total de la economía catalana pasó del 21,1% del 2016 al 21,4% del 2017. La 'consellera' Chacón eludió analizar la situación global de la economía catalana de una manera más pormenorizada y apuntar hacia dónde se dirige en el próximo año.

Temores tras el traslado de sedes

Patronales y sindicatos han mostrado reiteradamente en las últimas semanas sus temores a que la crisis de confianza en Catalunya desatada a finales del pasado año por las tensiones secesionistas, evidenciada con el traslado de sedes, pueda desembocar en pérdidas de confianza inversora en Catalunya. Chacón reconoció que "no ha venido ninguna empresa interesada en retornar la sede a Catalunya". Ante este panorama, la acción de Govern se ha conjurado para contradecir esos temores de pérdida de protagonismo de Catalunya con la divulgación de los indicadores más dinámicos, principalmente el índice de producción industrial, que subió el 3,7% el pasado año, y el de las exportaciones, que aumentaron el 8,7% interanual, la tasa más alta desde el 2011. 

Inversión industrial

La inversión industrial total creció en Catalunya el 12%, según la Encuesta de Inversión Industrial, un incremento realmente notable en comparación con el 2,9% del 2016 y que pone de manifiesto que la situación de la economía catalana está en fase expansiva del ciclo económico. Cabe destacar que para el conjunto del año 2018 se prevé un aumento del 13,4%, el más alto desde 1996.

Potencia del sector químico

Por sectores, la evolución el pasado año fue dispar. Chacón destacó la evolución del sector químico sin entrar en detalles. Con un crecimiento del 5,5% y un alza de la ocupación del 2,4%, se mostró el año pasado como el más sólido. No ha de extrañar esta fortaleza, dado que el sector químico se caracteriza por un comportamiento cíclico muy acusado y los años de bonanza mantienen crecimientos estables sostenidos en el tiempo. Destacó la fabricación de pinturas, barnices y tintes, con un crecimiento del 8% con respecto al año anterior.

Automóvil

Sobre el sector del automóvil, Chacón destacó más los éxitos pasados que las incertidumbres que se ciernen en el futuro tras la presión de las normativas medioamientales y la competencia creciente de los modelos híbridos ante la apuesta industrial más tradicional de las factorías catalanas. "Es un sector prioritario", aseguró Chacón. 

Inversión extranjera

La inversión extranjera de carácter industrial en Catalunya cayó el 27,1% en el 2017 en relación al 2016, el único dato negativo que registró la industria catalana el año pasado, cuando aumentó su peso sobre el total de la economía y creció en empleo. Cierto que la industria fue el sector más dinámico en términos de VAB (Valor Añadido Bruto) y el peso de la industria sobre la economía catalana creció del 21,1 % al 21,4 %, pero el dato de la inversión extranjera en la industria llama la atención.  Este indicador es una prueba de confianza a largo plazo en la economía y alcanzó los 1.127 millones de euros, lo que supuso un descenso del 27,1 % respecto del 2016.

En relación al conjunto de la inversión extranjera, la industrial representó el 36,4% del total y el 15,8% de las inversiones extranjeras industriales en España. El informe revela que el año pasado también cayó la inversión industrial catalana en el extranjero, hasta el 44,9%, lo que hizo que su peso sobre el total de las inversiones quedase en un 3,9%.

La 'consellera' de Empresa relativizó estos descensos al considerar que esos flujos son muy volátiles, dependientes de operaciones puntuales. En su opinión, es mejor comparar los datos quinquenales, ya que en ese caso la evolución de la inversión extranjera industrial en Catalunya es creciente.