El horizonte es innovar

Emprendimiento e innovación van unidos. Y para explotar al máximo las capacidades de los emprendedores en forma de productos innovadores, uno de los mejores caminos es servirse de los instrumentos europeos, como el plan Horizonte 2020Horizonte 2020. Así lo aseguró ayer la actual consejera coordinadora de Ciencia e Innovación en la representación permanente de España ante la Unión Europea, Elisa Robles, que participó por el foro Cornellà Creació junto a la directora general de Esade, Eugenia Bieto.

«Antes, las compañías se centraban en perspectivas internas, y ahora eso es imposible. La innovación no viene de arriba a abajo, ya no se puede pensar en clave local, porque todo el mundo está innovando, y muy rápido. Hay que ir afuera, abrirse al mundo, incluso compartiendo proyectos, con usuarios, competencia y universidades, que es una de las cosas que más miedo da a las empresas», aseguró ayer Robles a este diario.

En España, según Robles, continúa habiendo un problema de innovación, pues las empresas solo desarrollan el 40% de la I+D total, cuando debería ser el 60%, que es «lo más habitual en otros países». «Pero el panorama está cambiando. Hay mucho talento, y se está perdiendo el miedo», agrega.

APOYO

Las empresas no están solas en el camino de la innovación. Existen líneas de apoyo a la I+D a todos los niveles: local, regional, nacional y europeo. Y es en este último segmento donde hay una mayor presupuesto y mejores condiciones (en muchos casos, financiación hasta el 70% y a fondo perdido), aunque también mayor competencia. «Las ayudas europeas a la investigación se agrupan en programas marco. El sexto estaba dotado con 14.400 millones; el séptimo, con 41.000 millones; y el actual, el Horizonte 2020, con 77.000 millones», destaca. La ciencia y tecnología es la tercera política en términos presupuestarios, solo por detrás de la agrícola común y de los fondos estructurales y de inversión.

El objetivo de España es continuar mejorando la participación española en el programa Horizonte 2020 y el retorno en forma de subvenciones para las empresas, en muchos casos pymes. Si en el sexto programa se logró un retorno del 6,5% total del presupuesto, en el séptimo fue del 8,3%. «Ahora, el objetivo es conseguir un 10%», remarca. «Mejorar la tasa es síntoma de que las empresas están innovando más y, además, que nuestra contribución vuelve en forma de subvenciones», agrega.

Madrid es la comunidad que más aprovechó el anterior programa marco (30% del total de subvenciones recibidas en España), con Catalunya segunda (29%).