Contrapunto

De empresarios a pícaros

SALVADOR Sabrià

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

E n la reunión que mantuvo el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con los dirigentes de 37 de las mayores empresas, bancos y cajas del país hubo una ausencia significativa: no se invitó a ningún representante de la CEOE. La gran patronal está inmersa en un proceso electoral para sustituir a Gerardo Díaz Ferrán al frente de la presidencia. Pero la razón de no invitarla son los problemas judiciales a los que se enfrenta Díaz Ferrán y también su socio en el Grupo Marsans y Air Comet, Gonzalo Pascual, por sus responsabilidades en la quiebra de ambas empresas.

La semana pasada, un juez acordó suspender las facultades de ambos para administrar y disponer de su patrimonio, que debe ser sometido a las decisiones de los administradores concursales, dado que se considera plenamente acreditado que han incumplido las obligaciones de pago a sus acreedores.

Este caso ha puesto en evidencia una práctica que se da desgraciadamente en muchas ocasiones, y más en época de crisis. Algunos propietarios, cuando las cosas van mal dadas, se reconvierten de pronto de empresarios en pícaros y hacen lo posible para evitar sus responsabilidades ante el inminente fracaso de sus empresas. Para ello acuden a unas sociedades que se dedican, presuntamente, a reflotar compañías en crisis asumiendo las responsabilidades.

La realidad es, como se ha visto con Posibilitumm (la firma que compró el Grupo Marsans por una cifra simbólica) que no se reflota nada, sino que se desmantela el grupo y el nuevo comprador lo vende a trozos. Habrá que ver como acaba todo el proceso de Marsans, pero todo apunta a que seguirá la pauta de otros grupos que han entrado en ese negocio, por llamarlo de alguna manera, de los evasores de responsabilidades de empresas en crisis.

En Catalunya hemos vivido también algunas experiencias sonadas en este campo. Desde la venta de Fincas Corral, por parte de Calixto Corral, al liquidador Josep Xicola, que llegó a presentarse ante la opinión pública como el salvador del sector inmobiliario y que ahora tiene un reguero de sentencias y denuncias por impago de los sueldos de los trabajadores y de los alquileres e hipotecas; hasta el más reciente de Inoxcrom, que sigue las mismas pautas, según denuncia el bufete de abogados Col·lectiu Ronda.

No son casos aislados. Los abogados laboralistas advierten de que hay centenares. No obstante, la falta de medios de la justicia para actuar con celeridad unida a la rapidez con que los especialistas en estas prácticas se venden el patrimonio utilizando un entramado de empresas hacen que si al final se consigue una condena, difícilmente logra hacerse efectiva porque ya no queda nada para poder pagar.