LA JORNADA DE LIGA

Suárez ayuda a mitigar el golpe

Un doblete del delantero uruguayo ponen a salvo el resultado ante el Las Palmas, que ha podido ser más abultado si Neymar no llega a fallar otro penalti (2-1)

Bigas entorpece el juego de Suárez, durante el partido entre el Barcelona y el Las Palmas

Bigas entorpece el juego de Suárez, durante el partido entre el Barcelona y el Las Palmas / periodico

JOAN DOMÈNECH / BARCELONA

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Ante la ausencia del '10', ha resuelto el '9' ante el Las Palmas (2-1). También faltaban el '8' (Iniesta), el '7' (vacante desde la marcha de Pedro) e incluso el antiguo '6' (Xavi) que habrían acolchado el impacto de ver la lesión de Messi. Del '11' no ha habido noticias este sábado hasta que falló el penalti, y el '11' tendrá que ser omnipresente desde el martes para cargar el peso del enorme vacío que ha dejado la estrella argentina. Sergi Roberto se ha aliado con Rakitic para dominar la banda derecha, pero el Barça descansará, desde la semana que viene, con la llegada del Bayer Leverkusen, en la izquierda.

Luis Suárez ha ayudado a parar el golpe, mitigando el dolor que ha causado ver la prematura marcha de Messi, que en los tres minutos que ha permanecido en pie ha tenido tiempo de dejar uno de los gestos más exquisitos de la tarde: un control de balón en carrera de un pase transcontinental de Bartra. Segundos después, cuando ha querido batir suavemente a Varas, su rodilla izquierda no ha tenido la misma firmeza que la de Bigas al golpear el balón y se ha lastimado.

ENTRE LA RADIO Y EL MÓVIL

Como se ha lastimado el ánimo del equipo, que no estaba preparado para ese disgusto, imbuido de la sensación de inmortalidad de Messi que nunca abandona el campo. La hinchada se ha distraído, entre la radio y el móvil, más preocupada por las noticias del hospital que por las del campo: enfrente, el Las Palmas, un recién ascendido que intentará no bajar de golpe otra vez buscando puntos en otros campos.

La prematura marcha del astro ha dejado tocado al Camp Nou hasta el punto de afectar al juego --que no es para tirar cohetes en esta época, y este sábado menos--, pero no lo suficiente como para impedir la victoria. Otro gallo habría cantado frente a un rival de mayor pelaje. Suárez la ha puesto a salvo con dos goles en momentos muy oportunos. El eclipse ha sido breve gracias al delantero uruguayo, que ha aparecido cuando más necesario era: a la hora de rematar. En otras actividades no ha andado tan acertado.

TODO IGUAL

El tiempo dirá si el Barça se ofusca con la oscuridad que acelera la llegada del invierno. Equipo, no plantilla, tiene para ir liquidando los compromisos. Tiene a Neymar, fichado precisamente para sustituir eventuales desapariciones del número uno. El pelado Neymar sí se ha parecido en algo a Messi: al fallar el penalti, en la misma portería (el Gold Nord), ejecutándolo igual (con un disparo alto) y con idéntico desenlace, un misil tierra aire que no ha producido daños.

Tampoco los ha producido el gol del Las Palmas; acaso solo ha acentuado la amargura culé, que ni siquiera ha podido aliviarse con un resultado cómodo. El Barça ha podido golear, ha encajado un gol tonto (de rebote) e innecesario (la imprudente pérdida de Mascherano en una conducción), y Luis Enrique ha tenido que sacar a Gumbau para que rechazara los balones aéreos que ha enviado el once canario en la desesperada intentona final.

INVENTO DE INTERIOR

El Las Palmas ha abreviado por la falta de tiempo. El Barça también había abreviado hasta entonces la elaboración del juego más por voluntad propia que por la necesidad que tenía de su rival. Luis Enrique ha juntado a Mascherano y Busquets en el centro del campo y eso anuncia poca fluidez. La razón por la que ningún entrenador los reúne salvo momentos puntuales. Dos partidos coincidieron en la sala de máquinas el año pasado. Los dos contra el Valencia. Pero con Busquets en la derecha y Xavi en la izquierda.

Busquets ha ejercido como interior zurdo. En el sitio de Iniesta. Y no es Iniesta. Sus regates, excelentes, han sido estáticos y no han servido para avanzar líneas ni eliminar rivales como hace el capitán, suplente. Tampoco Mascherano está bragado para jugar a uno o dos toques como suele hacer 'Busi', que al final ha heredado el brazalete. Tampoco Munir es Messi, sobra decirlo, aunque su nombre aparece en el relato de los goles.

En cambio, Sergi Roberto ya puede competir con Alves. El de Reus ha atacado con criterio y acierto y sus centros han sido todos venenosos. Algo que será muy útil para un Barça que deberá reconvertirse, atacando en una idea más grupal y de responsabilidad más repartida.

Ficha del partido:

2 - Barcelona: Ter Stegen; Roberto, Piqué, Bartra, Adriano (Gumbau, min.90); Busquets, Mascherano, Rakitic; Messi (Munir, min.9) (Sandro, min.80), Suárez y Neymar.

1 - Las Palmas: Javi Varas; Simón, Alcaraz, Aythami, Bigas, Castellano; Roque Mesa (Valerón, min.68), Hernán (Culio, min.55), Wakaso; Araujo (El Zhar, min.68) y Jonathan Viera

Goles: 1-0, min.25: Luis Suárez. 2-0, min.53: Suárez. 2-1, min.88: Viera.

Árbitro: De Burgos Bengoetxea, del comité vasco. Cartulina amarilla a Hernán (min.36), David Simón (min.55), Wakaso (min.57), Alcaraz (min.61), Mascherano (min.80) y Suárez (min.90+).

Incidencias: Partido correspondiente a la sexta jornada de la Liga, disputado en el Camp Nou, ante 74.916 aficionados, según datos facilitados por el club catalán.