EL 'CASO CRISTIANO RONALDO'

El poder de Florentino llega hasta la justicia

El presidente blanco colocó a su mano derecha en el juicio de Cristiano Ronaldo para controlar la declaración

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Florentino Pérez lo ha vuelto a hacer. Su poder entre los altos cargos y su buena amistad con políticos han ayudado a que el pasado 31 de julio, en pleno verano madrileño, tuviera presente a su mano derecha para tener controlada las declaraciones de Cristiano Ronaldo; cuando el delantero del Madrid acudió a declarar ante la jueza de Pozuelo de Alarcón Mónica Gómez Ferrer, según publica El Confidencial. Cabe destacar que la fase de instrucción era solo para las partes, por lo que cualquiera no podía estar sentado en la sala.

El juicio tuvo un gran revuelo entre la prensa nacional e internacional. Hacienda le reclama al portugués 14,7 millones por un posible fraude fiscal. Solo un puñado de personas acudieron al acto, entre los que se encontraba José Luis del Valle, hombre de la máxima confianza de Florentino Pérez.

Tener allí a esa persona, permitió al presidente blanco saber qué decía el jugador ante la juez y evitar cualquier frase que causara polémica. Aunque no pudo evitar que la prensa lusa publicara la declaración de Ronaldo diciendo que le gustaría volver a Inglaterra y que si estaba en ese momento dando explicaciones sobre sus impuestos era por ser quien era.

El hombre misterioso

La persona que estuvo en la sala el pasado verano no es uno cualquiera. Como apunta el medio El Confidencial, José Luis del Valle, más conocido como 'Chítin', es desde 1999 secretario del consejo de ACS y coincidió con Florentino en UCD, donde fue director de la Asesoría Jurídica y diputado en el Congreso. Este abogado entró el pasado verano en la directiva blanca, semanas antes del juicio de Cristiano.

Gracias a tener Florentino José del Valle en la sala, pudo tener constancia del deseo del luso de volver a Inglaterra, por lo que evitó que el jugador portugués atendiera a los medios a la salida del acto pese a que el equipo de comunicación contratado por Cristiano había colocado un atril a las puertas del juzgado