El campeón

España se juega su corona

Pau Gasol y Calderón amplían la larga lista de ausencias ilustres del torneo

LUIS Mendiola

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Acostumbrada a los retos, habituada desde hace una década a pelear con naturalidad por los puestos altos del podio, a la selección española se le presenta un desafío de proporciones gigantescas en el Mundial de baloncesto que se iniciará mañana en Turquía. España acudirá como defensora del título, pero lo hará sin su gran figura, Pau Gasol, y consciente de que solo en dos de las 15 ediciones de los Mundiales el campeón logró retener la corona.

Para añadirle aún más dificultad, la selección sabe que le aguarda una trampa descomunal. La organización diseñó un cuadro en el que España (campeón mundial) y EEUU (olímpico) se cruzarán en las semifinales si van ganando sus respectivos partidos, en contra de toda la lógica. Es como privar a sabiendas al torneo de Wimbledon de una posible final entre Rafael Nadal y Roger Federer.

Sea por mantener a EEUU en Estambul durante todo el torneo por razones de seguridad o porque así aumentan las opciones del anfitrión de alcanzar la fase decisiva, esa hipotética cita de semifinales solo empinará la cuesta para el equipo español, lastrado además por la lesión de Calderón de última hora.

OPTIMISMO / El golpe es considerable por el peso del jugador extremeño en el grupo, aunque los integrantes del equipo mantienen un discurso optimista. «La preparación ha sido muy positiva. El golpe moral que ha significado la baja de Calderón ha sido duro, pero lo sustituirá Raúl López que, de alguna manera, ya conoce la casa y no le costará nada adaptarse. Y ahora viene lo mejor. Ya tenemos ganas de competir. Tenemos un buenfeeling», explicó ayer, antes de viajar, Juan Carlos Navarro, el capitán del equipo, cargo que, curiosamente, no ejerce en el Barcelona.

El mensaje ilusionante viene dado tanto por las propias fuerzas como por el músculo que se intuye en los rivales. Empezando por EEUU, con el que España midió sus fuerzas el pasado domingo, demostrando que está en condiciones de aguantar la comparación. En esa lista de enemigos, aparecen en lugar destacado Grecia, Serbia, Argentina, Brasil y el anfitrión Turquía, todos firmes candidatos a luchar por las medallas.

DIEZ CAMPEONES EUROPEOS / Aun sin Gasol ni Calderón, España mantiene las señas de identidad, la ambición y el compromiso que le llevaron a lo más alto del podio hace cuatro años. Es un equipo que por encima de los cambios en el banquillo -Pepu Hernández condujo a aquel equipo en Seitama y en el Europeo 2007, Aíto García Reneses lo dirigió en los Juegos de Pekín y Sergio Scariolo tomó el relevo el pasado año en el Europeo- sigue siendo reconocible. Mantiene a seis de los 12 jugadores que conquistaron el oro en Japón: Navarro, Rudy, Marc Gasol, Mumbrú, Reyes y Garbajosa. Dos no estarán por renuncia propia: Gasol y Jiménez. Y un tercero, Calderón, a causa de su lesión. Y continúa con 10 de los 12 con los que levantó el año pasado el título de campeón de Europa en Polonia. San Emeterio y Vázquez ocupan el lugar de Cabezas y Pau Gasol.

BAJAS DE PESO / Igual que ocurre con España, la mayoría de equipos estarán lastrados por las importantes bajas que desfigurarán este Mundial. Nombres de peso, muchos integrantes de la NBA, que se recuperan de lesiones o han optado por tomarse un descanso. En esa lista de bajas ilustres aparecen Parker y Turiaf (Francia), Siskauskas, los hermanos Lavrinovic y Jasikevicius (Lituania), Ginóbili y Nocioni (Argentina), Bogut (Australia), Nowitzki (Alemania), Hilario (Brasil), Lorbek y Smodis (Eslovenia), Okur (Turquía), Papaloukas (Grecia), Holden y Kirilenko (Rusia), Yao Ming (China) y las estrellas estadounidenses, como Lebron, Bryant, Wade y Howard.