Cristiano se estrella y Portugal se asoma al abismo tras otro empate

Otro empate que no le vale a Portugal, abocada a jugárselo todo en la última jornada ante Hungría después de que Cristiano Ronaldo tampoco acudiera a rescatar a su equipo frente a Austria. El día en que el delantero se convirtió en el jugador portugués con más internacionalidades (128), lanzó un penalti al palo a 11 minutos del final y no acertó en un buen número de ocasiones, en las que en algunas se estrelló con el meta austriaco. Una vez más, la falta de gol condenó al combinado de Fernando Santos, al que tampoco le alcanzó con el cambio de sistema.

No es el torneo de Ronaldo, que volvió a terminar desesperado al ver cómo el gol le daba la espalda. No pudo marcar ni de penalti, ni de falta, ni de cabeza. Solo lo hizo en fuera de juego y acabó preso de una gran ansiedad para dejar en el alambre a una selección a la que, tras la igualada ante Islandia, no le quedaba otra que cambiar el chip para alejarse de lo que puede ser un fracaso estrepitoso. Con las alarmas encendidas y a la espera de que Cristiano comenzara a dar alguna señal en este torneo, el combinado luso se presentó con un dibujo más atrevido. Con Quaresma, que apenas disputó unos minutos ante Islandia, el equipo luso comenzó a emitir mejores señales, aunque seguía adoleciendo de algo que se paga caro, la falta de gol.

MANO A MANO DE NANI

Ni las revoluciones que le metió al partido ni la agitación que provocaban Nani y Quaresma en la zaga austriaca daba resultados. El primero de ellos, el jugador del Fenerbahce, dispuso de un mano a mano con el meta austriaco, que le sacó el balón con el pie. Vieirinha completó la acción con un disparo que también detuvo Almer.

Cristiano asistía a la proliferación de remates de sus compañeros, pero sin entrar en faena. Tardó en hacerlo 21 minutos para fallar un remate muy claro que envió fuera. Más preciso estuvo Nani, aunque su cabezazo a la salida de un córner se fue al palo. La desesperación comenzó a apoderarse de los jugadores portugueses, que incluso vieron cómo Alaba pudo abrir el marcador al filo del descanso tras un libre directo que despejó Vieirinha en la línea de gol ante la presión de Harnik.

Si la primera mitad acababa con susto para los portugueses, la segunda se inició con otro gran sobresalto tras un duro  disparo de Ilsanker que detuvo Rui Patricio. La respuesta llegó a cargo de Cristiano, que se topó con el meta Almer en un disparo con la izquierda y tras un cabezazo a la salida de un saque de esquina.

MARCAR EN CUATRO EUROCOPAS

Se fue Alaba y Austria se metió de lleno en cuidar su jardín ante un enemigo que poco a poco comenzaba a sufrir un serio ataque de nervios, ya con Quaresma en el banquillo, con Nani ya sin oxígeno y con Cristiano ante su momento más duro en todo el torneo. Hinteregger le derribó dentro del área y el italiano Rizzoli señaló penalti. Lo lanzó Cristiano y lo mandó a la base del palo derecho. De esa forma, el jugador del Madrid volvía a perder la ocasión de convertirse en el primer jugador en marcar en cuatro Eurocopas consecutivas y, de paso, metía en un problema muy gordo a Portugal que cerraba el encuentro con un punto que le supo a derrota tras ver cómo su gran estrella no era capaz de marcar ni de penalti.  

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