DIARIO ASTRONÓMICO

¿Por qué la Pascua cae este año el 1 de abril?

procesion madrid

procesion madrid / periodico

Eduard Masana

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El próximo 1 de abril será el Domingo de Pascua, o de Resurrección. Como sabemos, se trata de una festividad móvil de nuestro calendario, que cambia de año en año. El criterio para fijar la fecha del Domingo de Pascua quedó establecido en el Primer Concilio de Nicea, en el año 325 d.C. Se decretó que sería el primer domingo después de la primera luna llena de la primavera.

Los criterios para fijar el Domingo de Resurrección se establecieron en el Concilio de Nicea del año 325 d.C.

Como inicio de la primavera se debe considerar siempre las 00.00 horas del 21 de marzo, independientemente del inicio real de la primavera astronómica, que puede ser el 20 o el 21 de dicho mes.  

A su vez, la luna llena que hemos de considerar no es la astronómica, sino la luna llena eclesiástica, que se tabula suponiendo que en 19 años hay 225 meses lunares de 29 o 30 días cada uno, lo que se denomina ciclo metónico. De esta forma, cada 19 años se repiten las fechas de las lunas eclesiásticas. La luna llena eclesiástica puede discrepar hasta un día respecto de la luna llena astronómica.

La norma actual sitúa la señalada fiesta entre el 22 de marzo, como muy pronto, y el 25 de abril, como muy tarde

La norma del Concilio de Nicea permite que el Domingo de Pascua caiga como muy pronto el 22 de marzo y como muy tarde el 25 de abril. Tomemos por ejemplo este año 2018. La primera luna llena después del 21 de marzo es el sábado 31 de marzo. Por tanto, el siguiente domingo, 1 de abril, será Domingo de Pascua.

La Pascua ya se celebraba en la tradición judía con anterioridad a la era cristiana, para conmemorar el éxodo del pueblo judío desde Egipto. Dicha festividad empezaba en el día 15 del mes hebreo de Nisán, el primer mes de la primavera. Al ser el calendario hebreo un calendario luni-solar, los meses se inician siempre en luna nueva, y el día 15 del mes de Nisán es pues la primera luna llena de la primavera.

Inicialmente ambas Pascuas, la cristiana y la judía, se celebraban el mismo día, hasta que el Concilio de Nicea, añadiendo la condición de que fuese el domingo posterior a la primera luna llena de la primavera, separó ambas festividades. Sin embargo, se mantuvo la movilidad de la Pascua cristiana, para que la resurrección de Jesús, que según los Evangelios aconteció durante la Pascua judía, se siguiese celebrando alrededor de dicha fecha.

En nuestro calendario, el Domingo de Pascua fija el resto de festividades móviles. Por ejemplo, el Miércoles de Ceniza se celebra 40 días antes; el Domingo de Ramos, 7 días antes, y el jueves de Corpus, 60 días después.

¿Siempre el mismo día?

Al parecer, el papa Francisco se ha planteado fijar la fecha de la Pascua de Resurrección, de manera que se celebre siempre el mismo día del año. Esto incluiría también a la Iglesia Ortodoxa, la cual se rige por el calendario juliano, actualmente 13 días desfasado respecto a nuestro calendario gregoriano.

La Pascua de Resurrección de la Iglesia Ortodoxa sigue la misma norma del Concilio de Nicea, pero dado que el 21 de marzo en el calendario juliano se corresponde con el 3 de abril de nuestro calendario, la Pascua ortodoxa puede caer hasta cinco semanas después del Domingo de Pascua católico. La unificación y fijación de la fecha de Pascua conllevaría sin duda ventajas a nivel de organización de nuestras vidas, pero nos privaría de una larga tradición que une astronomía e historia.

Sección elaborada en colaboración con el Parc Astronòmic Montsec - Centre d'Observació de l'Univers y el Parc Astronòmic Montsec - Centre d'Observació de l'UniversInstitut de Ciències del Cosmos de la Universitat de Barcelona