UN BARRIO DE COLLSEROLA CON ESCASAS INVERSIONES

Vecinos de Vallvidrera denuncian el mal estado de su barrio

Residentes del entorno de la plaza de Els Pins se quejan de inseguridad y escasa cobertura de telefonía

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jose43620349 barcelona 5 de junio de 2018 visita al barrio de vallvidre180619162905 / Ricard Fadrique

Óscar Hernández

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Una calle sin asfaltar. Los cables de teléfono y de la luz a la vista. Limpieza callejera deficiente. Pésima cobertura de telefonía móvil. Calles estrechísimas en las que resulta difícil pasar en coche. Continuos robos en las viviendas… Si no fuera por su privilegiada situación en la sierra de Collserola y por el lujoso diseño de las viviendas, bien ocultas tras los muros,  parece un barrio marginal en declive. Pese a pagar unos de los ibis más caros de la ciudad (de hasta 5.000 euros en algunos casos) , los vecinos del entorno de la plaza de Els Pins de Vallvidrera denuncian su marginación y abandono.

“Yo vine a vivir aquí hace 23 años porque esto es un paraíso. Entonces trabajaba en Londres y mi mujer vino a ver unas parcelas que estaban en venta. Realmente hay mucha calidad de vida porque no hay ruido, polución ni tráfico. Y solo escuchas los pájaros”, explica Enrique Llaudet, exempresario textil, ahora  jubilado, cuyo padre fue presidente del FC Barcelona. Llaudet es uno de los 47 vecinos integrados en la Associació de Veïns Vallvidrera-Plaça del Pi.

La entidad vecinal se formó en el 2007 y desde entonces no ha cesado de quejarse a los distintos gobiernos municipales por  las deficiencias que sufre el barrio. “Con PSC, Convergència y ahora Comuns, el trato y las palabras cambian, pero al final los resultados son nulos. Ahora nos dicen que como pertenecemos a Sarrià-Sant Gervasi y la renta per cápita es más elevadas aquí pues invierten menos dinero”, explica Anna Bosch, presidenta de la entidad vecinal.

Carencias evidentes

La falta de inversión es evidente en el espacio público de esta pequeña zona de Vallvidrera de bonitos chalets. Especialmente, al llegar a la calle de Romaninar, “la única que queda sin asfaltar en Collserola”, precisa Bosch, quien enumera junto a Llaudet la falta de inversiones públicas en el barrio. “Solo han arreglado la plaza del Pi y han puesto una mesa de pimpón”, lamenta Llaudet.

“Otro de los problemas que tenemos es la mala cobertura de telefonía móvil. La empresa que se encarga de las antenas sostiene que hay pocos contratos, que somos pocos vecinos, y que no es rentable instalar las antenas. Y el ayuntamiento dice que forzará a Movistar y Vodafone para que las instale, pero seguimos igual”, añade Bosch.

La deficiente cobertura telefónica no es un problema menor. Al margen de no poder pedir ayuda con el móvil en caso de necesidad si uno se encuentra con una urgencia en la calle, por ejemplo, la falta del servicio de telefonía móvil tiene otras consecuencias. Hay dispositivos de seguridad, como por ejemplo los teléfonos de emergencia de los ascensores o de los sistemas de seguridad, que no pueden contactar con sus centrales de alarma por la deficiente red 3G. “Algunos hemos tenido que instalar un teléfono fijo especial para esos servicios lo que resulta más caro”, añade Llaudet.

Cinco robos en una casa

Y es que el tema de la seguridad es también preocupante. “En mi casa me han entrado a robar cinco veces. Instalé cámaras, pero ahora entran encapuchados. Una vez se llevaron la caja fuerte que apareció tirada en un descampado de Sant Cugat como me había avanzado la policía”, cuenta Bosch.

Por ello, los vecinos han decidido contratar a su propio vigilante que patrulla todas las noches y. si ve algo extraño, llama enseguida a la policía. Tanto Mossos d’Esquadra como Guardia Urbana patrullan por el barrio sobre todo después de prod ucirse un nuevo robo, pero los residentes siguen sintiéndose desprotegidos y abandonados.

Respuesta municipal

Fuentes del Distrito de Sarrià-Sant Gervasi, del que depende el barrio de Vallvidrera,  han explicado a este diario que son conscientes de los problemas. “Sobre la seguridad, estamos valorando instalar cámaras de seguridad aunque se ha reiterado a la Guardia Urbana que refuerce su presencia en la zona”, indican.

Con respecto al asfaltado de la calle de Romaninar, el ayuntaniento “no tienen previsto a corto plazo intervenir, aunque es plenamente consciente de la necesidad de hacerlo y por eso se está trabajando en solucionarlo”, han indicado las mismas fuentes.

El ayuntamiento también ha respondido a este diario a las quejas por las carencias de la telefonía móvil: “El ayuntamiento se ha reunido con las compañías. La antena que se acabe instalando debe dar cobertura al  mayor número posible de vecinos. Cuando la ubicación de la antena esté clara, se remprenderán las conversaciones con las empresas de telefonía móvil”, afirman.