La playa para perros de Barcelona abre este martes

Los perros tienen desde este martes su propio espacio de esparcimiento playero en un tramo de la playa de Llevant de Barcelona habilitado para ellos, aunque el estreno quedará pendiente de algunos retoques que se completarán durante la semana. El espacio, de unos 1.200 metros cuadrados junto al espigón, queda acotado por un cierre modular perimetral de madera.

En ese espacio se han instalado las diversas infraestructuras necesarias. Por un lado se ha hecho llegar agua potable a las nuevas duchas (dos para personas y una de un modelo especial para las mascotas) y por otro se ha dispuesto mobiliario como un abrevadero canino, dos urinarios 'urbandogs' y dos papeleras empotradas en la arena. Los primeros días solo se podrá acceder por una puerta lateral de servicios, hasta que se complete la obra de ampliación de la pasarela existente, con un nuevo tramo hasta el acceso habitual para perros, debidamente señalizado.

El vecindario de la zona (tanto el Movimiento Diagonal Mar como la Plataforma Vecinas Noreste de Sant Martí) estarán pendientes del funcionamiento de esta infraestructura, contra la que se han movilizado en los últimos meses. Temen que haya una aglomeración de animales en la zona. Reivindican que se instale detrás del Fòrum (en los antiguos terrenos del fallido zoo marino), donde habría más espacio y no alteraría las costumbres de los bañistas del barrio.

El consistorio insiste en que se trata de una prueba piloto hasta el 25 de septiembre, con limitación de aforo y acceso solo para perros identificados y censados. Para evitar cualquier conflicto de convivencia, se mantendrán "las máximas condiciones de higiene", con un tratamiento específico de limpieza manual mañana y tarde, vaciado de papelera y cribado de rincones de la arena también manual, que por la noche se completará con la intervención de un tractor. 

Uno de los puntos más demandados por el vecindario es el seguimiento de la calidad del agua y la arena en la zona, que tendrá supervisión continuada. Todo el verano habrá dos informadores medioambientales supervisando su buen uso y repartiendo bolsas para excrementos.

El ayuntamiento insiste en que este será el único tramo, de momento, donde acudir a cualquier hora con los perros. El resto del litoral, según marca un decreto de alcaldía prohíbe el acceso de los canes en temporada de baño (del 1 de junio hasta el último domingo de septiembre, y los fines de semana de abril a octubre), excepto si son perros de asistencia.