Barcelona echa a los manteros del puerto

Primer día de un dispositivo policial permanente

Un operario riega la acera para que no se instalen los manteros, este lunes, en la zona del puerto de Barcelona.

Un operario riega la acera para que no se instalen los manteros, este lunes, en la zona del puerto de Barcelona. / periodico

GUILLEM SÁNCHEZ / BARCELONA

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El Ayuntamiento de Barcelona no tolerará “zonas de venta ilegal descontrolada”, ha subrayado este lunes el comisionado de Seguridad, Amadeu Recasens. Para ello ha diseñado un dispositivo a tres bandas –Guardia Urbana de Barcelona, Mossos d'Esquadra y Policía Portuaria– que situará agentes uniformados cada mañana en la zona del puerto. Lo ha dicho este lunes después de una operación policial contra el 'top manta' en la zona del puerto.

El objetivo es disuadir a los 'manteros' antes de que aparezcan y terminar con este oasis administrativo que habían hallado aquí. Esta zona, regida por la <strong>Autoridad Portuaria</strong>, escapa a la competencia municipal. La policía portuaria, su propio cuerpo, está integrada por unos 150 agentes que ya llevan meses pidiendo ayuda a la alcaldesa y al 'conseller' de Interior.

Los Mossos son los que tienen el deber de investigar los delitos contra la propiedad industrial que implica la distribución de material falsificado. La Guardia Urbana es la responsable de sancionarlos administrativamente porque no pagan los permisos municipales. Durante las últimas “tres semanas”, aclara Recasens, el ayuntamiento ha estado trabajando en este dispositivo. Existe un convenio entre la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento, por un lado, y el protocolo Víctor Alfa, entre Guardia Urbana y Mossos, por el otro. El operativo de este lunes triangula entre ambos. 

El hecho de que los cuerpos de seguridad no actuaran decididamente en esta zona hasta este lunes ha generado un ‘efecto llamada’ entre los vendedores ambulantes de otros municipios del litoral catalán, que cada día se presentan en la ciudad llegados en tren, critican los grupos municipales del PSC y CiU.

Por eso Recasens ha remarcado que la presencia policial será permanente y estable a partir de ahora en todo el puerto. Según fuentes del consistorio, se ha actuado para atajar este ‘efecto llamada’ y reducir el fenómeno nuevamente a los manteros de la ciudad, con los que el Ayuntamiento de Ada Colau tiene diversas iniciativas en marcha para buscar un desenredo social definitivo para la madeja del Top Manta.

La Associació d’Artesans de Palau del Mar asegura que desde finales de agosto la situación se había vuelto “insostenible”. “Vemos bien la operación, pero que los policías vuelvan cada día, nadie tiene más paciencia que los manteros”, avisa Àngels García, artesana y secretaria de la organización.

La presencia de los vendedores irregulares en el puerto ha disminuido la actividad comercial de estos trabajadores en un “60%”. Ellos pagan “permisos” para establecer su parada, un régimen de “trabajadores autónomos” y los “impuestos” que generan sus ventas.

En las últimas semanas, el mercado improvisado de venta ambulante del Port Vell había alcanzado un tamaño insólito en la ciudad a lo largo de 300 metros, con cerca de 200 puestos bien organizados, lo que incluso había llegado a dificultar el cruce hacia el Port Olímpic por el Portal de la Pau.

ARRANQUE DEL DISPOSITIVO

Este lunes a las 7.00 horas miembros uniformados de los Mossos de Esquadra, Guardia Urbana y policía portuaria se han desplegado en Colón, al Moll de la Fusta y a Pla de Palau. Ha sido la primera acción de un dispositivo que va más dirigido a “saturar” policialmente el espacio donde se están ubicando los manteros que a perseguirlos para intervenir su material.

Por ello la operación tiene un carácter preventivo y no se han producido ni intervenciones ni detenciones. La duda está hoy en ver cómo reaccionan los manteros y conocer qué nuevo punto eligen para instalarse