Los trabajadores del metro volverán a la huelga tras rechazar el preacuerdo con TMB

Los trabajadores del metro de Barcelona han rechazado este jueves la nueva oferta de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) para intentar calmar las aguas del conflicto laboral que mantienen ambas partes desde principio de año. La plantilla ha avalado así los paros parciales convocados durante cuatro días, del 30 de mayo al 2 de junio. Tanto en la asamblea de la mañana como en la de la tarde, los empleados del subterráneo, de manera mayoritaria, han optado por mantener el pulso a la compañía, que pedía una tregua mientras intenta poner sobre la mesa una propuesta de convenio colectivo que sea del agrado de los sindicatos. 

La semana pasada, TMB informó de que ambas partes habían llegado a un preacuerdo. Sucedía durante la 22ª reunión en cinco meses, y garantizaba la paz social durante un año para poder seguir dialogando las condiciones laborales sin la amenaza de dejar a la ciudad sin subterráneo. "Esta propuesta, que ha sido posible fruto del esfuerzo y el compromiso de todas las partes, debe crear un escenario de confianza que permita negociar temas que preocupan a ambas partes", rezaba la empresa el 20 de mayo, a través de un comunicado. La idea era evitar las movilizaciones hasta el 31 de mayo del 2017. A cambio de no convocar más huelgas, la dirección aumentaba el sueldo un 1% y pasaba 60 contratos de tiempo parcial a completo. Al rechazar el preacuerdo, esos incrementos de salario (unos 32 euros mensuales) y el resto de  quedan anulados. 

La capital catalana ya se quedó sin metro durante los días del Mobile World Congress, la tarde del Barça-Madrid y durante la semana de la feria Alimentaria. Los usuarios del subterráneo usaron otros medios de transporte, lo que evitó que las jornadas de paro fueran caóticas.