REUNIÓN DE LA MESA DE TRABAJO

El carril bus-taxi-moto encara el examen final con todo en contra

Motoristas circulando por la calle de Aragó, a la altura de Bailèn, donde hay una zona avanzada para motos, el pasado 5 de agosto.

Motoristas circulando por la calle de Aragó, a la altura de Bailèn, donde hay una zona avanzada para motos, el pasado 5 de agosto.

CARLOS MÁRQUEZ DANIEL
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Recta final del debate sobre si las motos deben o no usar el carril bus-taxi de manera legal. El ayuntamiento ha citado esta tarde a todos los implicados para tomar una decisión que, salvo sorpresa de última hora, echará por tierra una propuesta de modificación de la ordenanza sobre la que pesan cinco informes desfavorables que alegan criterios de seguridad, fluidez del transporte público y extrema estrechez del vial en cuestión. Será un encuentro no ausente de tensión, donde el concejal de Movilidad, Eduard Freixedes, se debatirá entre una promesa electoral de CiU que sobre el papel no parecía admitir peros y el dictamen técnico que no abre la puerta si quiera a realizar una prueba piloto.

La cita es a las 18.30 horas en el ayuntamiento. En una de las sillas se sentará José Tadeo, representante en Catalunya de la asociación Mútua Motera, entidad que en el pasado mandato ya tuvo sus más y sus menos con el equipo de Jordi Hereu y que ahora, con la llegada de un partido que parecía afín a una demanda histórica, empezaba a ver la luz al final de su túnel. Alrededor de la mesa, además de Freixedes, tomarán también la palabra representantes del RACC, Transportes Metropolitanos de Barcelona, el Bicicleta Club de Catalunya, Promoción del Transporte Público, el Sindicat del Taxi de Catalunya, Guardia Urbana, la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas y la Asociación Española de Mensajería.

EL «STATU QUO» DEL RACC / En el terreno político, solo el PP está dispuesto a dar su apoyo al carril bus-taxi-moto. De hecho, en la pasada comisión de Movilidad, celebrada hace dos semanas, los conservadores se quedaron solos en una votación sobre el tema. El día anterior, el RACC, entidad en la que el alcalde Trias había depositado gran parte de su decisión final, había hecho público un informe en el que compartía sus temores e invitaba a mantener «la actual situación de statu quo». De hecho, en aquella sesión, el nombre del automóvil club fue uno de los más repetidos. A ello hay que añadir el cambio de postura del PSC. Si en un primer momento, a pesar de haber rechazado la idea durante 32 años de gobierno, huían delnocategórico, ahora, una vez conocidos todos los estudios desfavorables, los socialistas sostienen que no quedan «argumentos sólidos» para defender la idea.

IDEA «POSIBLE Y VIABLE» / José Tadeo se mostraba ayer «convencido de que el proyecto es posible y viable», y a pesar de que las últimas declaraciones de miembros del gobierno local -el propio Trias dijo que no aprobaría «nada que pudiera perjudicar la seguridad de los motoristas»- no parecen ayudar a su causa, él no ha visto «ningún cambio de posicionamiento» en el consistorio. «Creo que cada uno debe poder expresar sus opiniones y, siempre que se pueda, respaldarla con datos», apuntó.

Tadeo, que evitó hablar de posibles movilizaciones en caso de que la propuesta naufrague, aseguró que la mayoría de informes «no son parciales», ya que están redactados «por partes interesadas en el asunto», en referencia a TMB o el Instituto Metropolitano del Taxi. Luis Berbel, presidente del Sindicato del Taxi, sostenía ayer que la reunión, vistos todos los estudios, «no debería ni ser convocada».