Barcelona invertirá 7 millones en reforzar su marca y su promoción económica en el mundo

En el último año y medio, el Ayuntamiento de Barcelona ha tomado distintas decisiones que le han puesto en contra de algunos sectores económicos que lo acusaban de castigar la actividad empresarial o poner trabas a las inversiones de muchos tipos, no solo turísticas. Pero los planes presentados este lunes por el teniente de alcalde de Empresa, Cultura e Innovación, Jaume Collboni, suponen que la ciudad “relanza sus relaciones económicas con el exterior con el objetivo de dinamizar la economía local”. Medidas que incluyen un programa para captar más talento internacional, mejorar la imagen de la marca Barcelona, atraer actividad y generar puestos de trabajo de calidad, sacar tajada del Brexit, atraer inversiones chinas y más conexiones aéreas interncontinentales.

Las políticas “de promoción internacional para consolidarse como ciudad abierta y global”, contrastan con algunas iniciativas del gobierno de Colau hasta la fecha y dejan entrever el papel bisagra de Collboni en las cuestiones económicas. Ante el riesgo, señalaban algunos sectores, de que Barcelona se aislase económicamente, los nuevos pasos implican doblar la inversión en esas políticas, hasta los 7 millones de euros. Una cifra, no obstante, ue parece modesta en relación a la lista de iniciativas y ambiciones que ya se concretan.

ATRAER INVERSIONES

Para empezar, Collboni ha planteado la necesidad de atraer inversiones y crear puestos de trabajo de calidad, estables y con salarios altos. Poniendo el ejemplo de la exitosa manifestación ciudadana del sábado a favor de la acogida de refugiados, opina que, “con esa lógica”, el ayuntamiento también debe bajar fronteras y tender puentes, con los reclamos del conocimiento y el talento. “No queremos dejar de jugar en la liga de las grandes ciudades”, ha dicho el edil en rueda de prensa, y repetido por la tarde en conferencia ante empresarios, Cambra de Comerç, representantes de la Fira, del Port, el aeropuerto de El Prat, cuerpos consulares y otras administraciones, académicos, así como de la sociedad civil.

Una representación de todos estos, precisamente, integrará también el Consejo Asesor de Promoción de Ciudad, con el objetivo de alinear actores públicos y privados “para sumar esfuerzos” y posicionar Barcelona como ciudad atractiva para la actividad económica, también en el conjunto del área metropolitana. Una declaración de intenciones que contrasta con las reticencias iniciales de Colau de integrar a los operadores privados en la promoción o gestión de la metrópolis.

GESTIÓN DE LA MARCA

En ese marco, será imprescindible desencallar la gestión de la marca Barcelona. Collboni asume que hasta ahora “solo había defensa de la titularidad de la marca en los tribunales”, sin estrategia alguna. Para ese fin se ha seleccionado a un técnico que la desarrolle, teniendo claro que “la marca pertenece a los ciudadanos y hay que decidir cómo la mostrarnos al mundo” implicando a empresarios y sociedad civil.

Para construir esa imagen, otorga a la cultura un papel fundamental , “ofreciendo otra ciudad distinta de la turística”, ha subrayado. Y ha puesto el ejemplo del Sonar, que se está presentando en distintos destinos.  El reto es generar percepciones favorables para que se instale actividad económica, facilitar la atracción de congresos, ferias, actividad cultural y deportiva. Y hasta potenciar ámbitos concretos como el diseño, la moda y la industria creativa.

La atracción de talento se vertebrará desde la plataforma Barcelona International House, para acoger y dar apoyo a extranjeros que traen su talento a la ciudad, primero como oficina virtual, y en una segunda fase con sede física. “Hay que vincular a la comunidad internacional de Barcelona”, ha enfatizado. Mientras que, lanzando su red al extranjero para atraer inversiones, la ciudad apuntará sobre todo al mercado chino, potenciando los negocios con empresarios asiáticos.

ZONAS DE INCERTIDUMBRE

El ayuntamiento también persigue buscar posibles inversiones en zonas con clima de incertidumbre como el Reino Unido, con el Brexit, o EEUU. En los mercados europeos ya maduros se reforzarán posiciones, mientras que se quiere hacer prospección y promoción en el sudeste asiático, América Latina, Próximo Oriente, Asia Central y Europa del Este.

Unos vínculos que van muy ligados a las conexiones aéreas, que Barcelona espera mejorar aprovechando que la capital catalana acogerá este año el World Route, el mayor encuentro internacional del sector de las aerolíneas, los aeropuertos y agencias de promoción territorial. Aunque este año ya están previstas conexiones directas y 'low cost' con Los Ángeles, San Francisco, Chicago, Seul, Hong Kong y Shangai, destacó, se presionará para atar también vuelos con Tokio, México DF y Bangkok. Con la capital japonesa hay varios operadores sobre la mesa, que se espera que se concreten para el 2018, ya que cada año 165.000 viajan entre ambas ciudades utilizando enlaces.