ESTRUCTURA PIONERA

Barcelona crea un cuerpo de 56 funcionarios municipales para velar por la transparencia

Jaume Asens en la presentación de la Oficina per la Transparéncia

Jaume Asens en la presentación de la Oficina per la Transparéncia / periodico

CRISTINA BUESA / BARCELONA

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Un cuerpo de 56 funcionarios municipales velará por la transparencia en el Ayuntamiento de Barcelona. El gobierno de Ada Colau ha presentado este jueves la oficina para la transparencia y las buenas prácticas con el objetivo de fiscalizar la actividad municipal. Se trata de un organismo pionero, ha explicado el tercer teniente de alcalde de Derechos de Ciudadanía, Participación y Transparencia, Jaume Asens, que ha subrayado que la transparencia es el "antídoto" para evitar "el arraigo de la corrupción".

"Debemos desconfiar también de nosotros mismos. Si mi secretaria ve un comportamiento erróneo en mi actuación lo podrá denunciar", ha ejemplificado Asens, que estaba acompañado del gerente de Recursos, Joan Llinares, prestigioso jurista incorporado hace unos meses al gobierno de Barcelona en Comú (BC) y que fue conocido por su contribución decisiva a la investigación del saqueo del Palau de la Música Catalana.

REVELACIONES ANÓNIMAS

El medio centenar de funcionarios estarán formados específicamente para este menester y, aunque no estarán liberados del resto de sus funciones, se ha realizado un proceso de selección para elegir a los más aptos. Aunque Llinares ha rechazado que se les conozca como una especie de "asuntos internos", este cuerpo que rendirá cuentas a la oficina de transparencia se encargará de ir mucho más allá de las auditorías que históricamente se han llevado a cabo tanto en la administración local como en otras. Por cierto unas investigaciones, ha recordado, que siempre ha dado resultados impolutos. 

Las denuncias por supuestos casos de irregularidades podrán ser también anónimas, aunque Asens ha asegurado que preferirían que fueran con nombre y apellidos. No obstante, el temor a represalias podría disuadir a quienes decidieran revelar las anomalías. Para los ciudadanos de a pie, se habilitará igualmente un "buzón ético" al que se podrán hacer llegar estas delaciones.

CONSEJO ASESOR

El órgano pretende que se eviten posibles casos de malversación de fondos públicos, enriquecimiento ilícito, conflictos de intereses, incompatibilidades o uso particular de información obtenida a través del ejercicio de la función pública. "No queremos proyectar una sombra de duda sobre la institución sino fortalecer su integridad", ha justificado el teniente de alcalde.

La nueva estructura contará igualmente con un consejo asesor, algunos de cuyos miembros han asistido igualmente este jueves a la presentación. Entre ellos estaba la activista de XNet, Simona Levi, que ha explicado que se había sentido "emocionada" por el hecho de que una administración pública se adhiera a un sistema similar de filtraciones ciudadanas al que ella y Sergio Salgado habían impulsado para asuntos como el caso Bankia.

EL CRÁTER DE LA CORRUPCIÓN

Junto a Levi y Salgado estaba también el ex diputado de la CUP David Fernàndez, que ha alertado sobre el "cráter" que ha provocado entre la ciudadanía los casos de corrupción conocidos en los últimos años. "Estamos aquí para hacerle la vida imposible a la corrupción", ha lanzado. Enric Pons, de la plataforma Auditoria Ciutadana del Deute, que como los otros tres formará parte del consejo asesor, ha advertido que su cometido será "apretar" para que la oficina de transparencia funcione correctamente.

Llinares y Asens han explicado que se realizarán informes semestrales y anuales sobre la actividad del nuevo organismo.