Bosch se despide "con dolor" pero subraya que Ernest Maragall es mejor candidato

Alfred Bosch ha arrojado la toalla. El todavía presidente del grupo municipal de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, cargo en el que por ahora seguirá, ha anunciado este viernes en una reunión extraordinaria de la asamblea del partido en la capital catalana que renuncia a ser candidato a la alcaldía de Barcelona y que cede el paso a Ernest Maragall para que asuma esa responsabilidad: "Es el mejor candidato".

Menos de 24 horas después de que se conociera que ERC iba a relevar a Bosch, el concejal ha escenificado su renuncia y ha explicado: "Después de hablar con Oriol Junqueras, con Marta Rovira y con gente que aprecio tomé esta decisión, confieso que con dolor pero también con espíritu ganador y sentido de la responsabilidad". Lo que equivale a afirmar que más que dimitir ha aceptado la sugerencia de que debe hacerlo.

Votación interna

Ha subrayado que el partido debe celebrar unas nuevas primarias para certificar la designación de Maragall con el voto de la militancia. Ha dado por hecho que así se hará. Bosch ganó las primarias para convertirse en alcaldable republicano en el 2019 en marzo pasado, en una elección interna a la que no se presentó nadie más y en la que logró el 87% del apoyo de los votantes. Tendría su miga que ahora Maragall se topará con algún rival inesperado en esas primarias que volverán a celebrarse.

Bosch ha entrado en la reunión de la asamblea entre aplausos que se han prolongado un par de minutos. "Las horas difíciles quieren valentía, generosidad e inteligencia. Para mí es una hora difícil, agradezco las muestras de apoyo y también las de los que me han pedido que continúe", ha proclamado el concejal, cariacontecido, antes de precisar que iba a formalizar su renuncia este mismo viernes: "Hoy es un día en el que nuestras ambiciones quedan detrás".

El fichaje

Bosch ha cubierto de elogios a Maragall: "La gente progresista y soberanista sabe que los mejores para hacer un cambio somos la gente de ERC, independientemente de quién sea el candidato. Somos nosotros los que podemos decidir si podemos tener un candidato todavía mejor. Y ese candidato existe y se llama Ernest Maragall. Es de los políticos más valorados, conoce muy bien la ciudad y el ayuntamiento y lleva el apellido del mejor alcalde que ha tenido Barcelona, su hermano, Pasqual Maragall".

El republicano ha aludido a la edad de su sucesor, aunque quizá solo los malpensados creerán que lo ha hecho con retranca: "Como persona experimentada, veterano bregado, sabrá aprovechar el trabajo que ha hecho el partido y el grupo municipal. Sabemos que sabrá entender el proyecto de futuro que hemos construido. Con Ernest Marargall tenemos la victoria más cerca".

Según el dimisionario, la intención era que el propio Maragall asistiera al acto en el que se ha escenificado el relevo: "No puede estar aquí porque está reestrenando la sede de la Generalitat en Berlín. Ernest, tienes que ganar Barcelona. Contigo la ganaremos”, ha proclamado. “Os pido que abracéis a Ernest Maragall”, ha reclamado a la militancia sobre el nuevo alcaldable, primarias mediante.

Bosch ha explicado que seguirá como presidente del grupo municipal durante un tiempo. Es de suponer que los republicanos le encontrarán un acomodo satisfactorio, sea en el Govern como conseller o no. Qué menos, a la vista de que quizá este sea el primero relevo forzado que se da en las filas republicanas en el que el afectado acepta con disciplinada obediencia. Lo normal era que estos asuntos se dirimieran con mucho menos fair play.