Artículo de la alcaldesa de Barcelona

Barcelona ama a la Marina

La alcaldesa recuerda que la llegada del metro no habría sido posible sin la lucha de vecinos y asociaciones

zentauroepp44932282 metro l10180907162432

zentauroepp44932282 metro l10180907162432 / TMB

Ada Colau

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Este sábado reparamos una injusticia y damos cumplimiento a una reivindicación vecinal con más de cuarenta años de historia. Finalmente, el metro llega a los barrios de la Marina. No podía ser que en la Barcelona del siglo XXI, más de treinta mil barceloneses siguieran sin poder utilizar el metro para trasladarse de casa al resto de la ciudad. No podía ser que los barrios del suroeste, justamente allí donde vivían los obreros que construyeron el primer metro de Barcelona, permanecieran desconectados. La Marina ha hecho grandes sacrificios por la ciudad: perdió sus huertos, su acceso al mar, sus masías, pero este amor por Barcelona no siempre ha sido correspondido. Era el momento de corregirlo.

El metro ha tenido un papel primordial en la historia de nuestra ciudad facilitando el desplazamiento diario de los ciudadanos, actuando como refugio durante los bombardeos fascistas y convirtiéndose en uno de los principales instrumentos de creación de la ciudad metropolitana, la ciudad real que ha ido vertebrándose a medida que se ampliaba la red. Hacer metro es hacer ciudad. Como alcaldesa, estoy convencida de que invertir en el transporte público es invertir en la creación del futuro de Barcelona: para construir una ciudad más limpia, más justa y ambientalmente más responsable que garantice el derecho a la movilidad de sus ciudadanos y el derecho a la conectividad de sus territorios.

La llegada del metro a la Marina tiene un significado especial que conecta con el modelo de ciudad que desde el Ayuntamiento estamos promoviendo: una ciudad cohesionada social y territorialmente. De la misma manera que hemos priorizado la justicia social a través del impulso de políticas sociales y de vivienda, priorizamos la justicia territorial mediante inversiones en los barrios que más lo necesitan, porque no es justo que en la ciudad sigan existiendo barrios de primera y barrios de segunda.

La llegada del metro a la Marina facilitará los desplazamientos metropolitanos a las personas que viven allí, pero también facilitará que el resto de barceloneses conozcan estos barrios que han pasado de estar donde "la ciudad cambiaba de nombre", en palabras del querido Francesc Candel, a convertirse en uno de los puntos de creación de la nueva Barcelona a partir de la transformación urbana que se está llevando a cabo en el barrio de la Marina del Prat Vermell.

Lucha vecinal

Por todos estos motivos, la llegada del metro a la Marina ha sido una prioridad para este Ayuntamiento y hemos realizado un sobresfuerzo económico para desencallar la situación. Eso no habría sido posible sin la tenacidad, el empuje y el espíritu de lucha del tejido vecinal y asociativo de la Marina. No podemos olvidarlo.

De la misma manera que sin la lucha vecinal no tendríamos hoy muchas plazas, equipamientos y espacios verdes que hacen de Barcelona una ciudad admirada en todas partes, ha sido la movilización vecinal la que ha hecho llegar el metro a la Marina. Los vecinos son los auténticos protagonistas de esta historia y hay que agradecerles que hoy Barcelona sea una ciudad más justa, más humana y más sostenible.

TEMAS