Ter Stegen sufre un esguince de rodilla y se pierde la Supercopa

No tiene suerte Ter Stegen en los meses de agosto. Es cruzar el ecuador del verano y al alemán, que llegó de la mano de Zubizarreta para convertirse en el portero indiscutible del Camp Nou tras la era Valdés, le surgen los problemas, ya sea en forma de lesiones o por las dudas que generan sus actuaciones. El último varapalo le llega cuando el debate y la pugna abierta con Bravo por la titularidad era más candente que nunca. Ter Stegen sufrió en el entrenamiento un esguince del ligamento lateral interno de la rodilla izquierda y, por de pronto, se pierde el partido de ida de Sevilla de la Supercopa. Y, posiblemente, algunos más, aunque la nota médica del club no desvela el tiempo de recuperación.

La desgracia del alemán supone un alivio para Bravo, temeroso de perder la titularidad en la Liga, y un descanso para Luis Enrique, ya que la baja de Ter Stegen le facilita la elección, de la que no había dado pista alguna. De ahí que decidiera que los tres porteros se repartieran a partes iguales los minutos del Gamper. Un partido en el que, curiosamente, el único que mantuvo su portería a cero fue Masip.

LA APUESTA DE LUIS ENRIQUE

Ya se cebó el infortunio con Ter Stegen en su primera temporada, cuando, también en pretemporada, sufrió una fisura en la tercera vértebra lumbar que le tuvo tres semanas de baja. La lesión llegaba justo cuando el entrenador debía apostar en la Liga por Bravo o por el alemán. Como ahora, la baja facilitó la elección y nunca se sabrá qué hubiera sucedido de estar los dos en condiciones. Aunque bien es cierto que si Ter Stegen fue una apuesta decidida de Zubi, el portero chileno lo fue de Luis Enrique.

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Bravo se quedó con la Liga y Ter Stegen, con la Champions y la Copa. Y los dos terminaron contentos a medias porque siempre se desea lo que no se tiene. Ganó  la Liga Bravo (y el trofeo Zamora), pero no disputó ni un minuto de la Copa ni, sobre todo, de la Champions, la competición más deseada. En cambio, Ter Stegen saboreó la gloria en Berlín y en el Camp Nou con la Copa del Rey. Pero no disputó ni un minuto en la Liga.

OCHO GOLES EN DOS PARTIDOS, LA CONDENA

El trompazo para Ter Stegen la temporada pasada, en la que perdonó 11 días de vacaciones,  fue quizá más doloroso. No le apartó una lesión sino los ocho goles encajados en dos partidos consecutivos: cuatro le metió el Sevilla en la Supercopa de Europa, aunque el Barça se llevó el título (5-4) y otro ‘póquer’ encajó ante el Athletic en la ida de la Supercopa de España (4-0), quedando especialmente retratado en el primer gol: despejó frívolamente con la cabeza un balón que podía atajar y propició que el rechace lo aprovechara San José para meter un golazo desde el centro del campo. Así que llegó el primer partido de Liga y, otra vez Bravo, se llevaba el premio.

Sin embargo, una nueva oportunidad se abrió para el alemán tras la segunda jornada. Se lesionó el chileno en el sóleo y Ter Stegen se convertía en titular en la Liga por primera vez. Jugó tres partidos y encajó seis goles: uno ante el Levante, otro ante el Atlético y cuatro ante el Celta. En la comparación con Bravo, perdía de nuevo. Una nueva lesión muscular de Bravo cedió de nuevo el testigo a final de temporada. Quedaban dos partidos (Espanyol y Granada), y el alemán jugó los dos sin encajar (5-0 y 0-3), participando de la fiesta por la Liga en Granada en la última jornada.

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Con varias y tentadoras ofertas sobre la mesa (una del Manchester City), el club logró frenar momentáneamente su marcha porque ya no quiere jugar solo la Copa y la Champions . Ahora, una nueva lesión se interpone en la lucha por la titularidad de la Liga. El debate sigue abierto. El jugador, sin embargo, se muestra optimista y ha colgado una foto haciendo ya recuperación en la ciudad deportiva con un claro mensaje: "No hay tiempo que perder. Cabeza alta y centrado en mi recuperación".