Polémica por el aplazamiento del Barça-Levante de la Liga Iberdrola

Polémica a la vista en la liga de fútbol femenino. La RFEF anunció este viernes que el Barça-Levante que debía celebrarse este domingo a la una del mediodía quedaba aplazado debido al brote de gastroenteritis que había azotado a gran parte de la plantilla azulgrana a su vuelta de Kazajistán, donde el miércoles comenzó (con derrota) su andadura en la Champions. El club valenciano, sin embargo, ha puesto en duda la enfermedad de las futbolistas.

Fuentes del Levante han mostrado a la agencia EFE su sorpresa por el hecho de que el Barça hiciera la petición a la RFEF "a espaldas" del club club granota, con el que solo contactó después de haber hablado con la RFEF, "algo ilógico cuando lo normal es hablar entre clubs", opinan dichas fuentes.

Petición anterior denegada

Pero el Levante tira con bala al revelar que el Barça había solicitado con anterioridad que el partido se disputase el próximo martes para tener más días de descanso tras su viaje a Kazajistán, y que tras la negativa del club valenciano incluso pidió que en lugar de a las 13.00 horas se jugase a las 19.00.

El club granota, que tras una fuerte inversión este año vuelve a ser uno de los aspirantes al título, se cuida de poner en duda el informe médico, pero a la vez muestra su extrañeza por la coincidencia entre la solicitud de aplazar el choque y la repentina enfermedad masiva de las jugadoras del Barça.