GOLEADOR EN TRATAMIENTO

Terapia para curar a Luis Suárez

Luis Suárez protesta en un lance del partido Valencia-Barça.

Luis Suárez protesta en un lance del partido Valencia-Barça. / periodico

Joan Domènech

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Luis Suárez se pasará las dos próximas semanas sometido a una puesta a punto particular para que el 20 de octubre, cuando se reanude la Liga con el Barça-Sevilla -duelo en la cumbre donde se dilucidará el liderato-, reaparezca otro jugador del que se despidió este domingo en Mestalla, en otro partido que dejó de relieve su mal estado de forma.

Dos semanas de descanso, pero de trabajo esperan al delantero uruguayo. Descanso porque no irá con la selección charrúa a disputar dos bolos a la otra punta del mundo, en los amistosos programados en Corea del Sur y Japón, lo que interrumpirá la cadena de partidos acumulada desde que comenzara la temporada.

Suárez ha participado en los 11 encuentros oficiales. Ter Stegen y Piqué los han jugado íntegramente (990 minutos); Messi fue suplente ante el Athletic (935 minutos) y Suárez en Leganés (928 minutos, el 93% del total). Ambos tuvieron que entrar al campo para enderezar el resultado. Infructuosamente, en medio de la mala racha del Barça, que solo ha obtenido una victoria (sobre el Tottenham, en la Champions) en los últimos cinco encuentros. El equipo de Valverde cayó en Leganés (2-1) y empató con el Athletic (1-1). Antes igualó con el Girona (2-2) y, después, este domingo, en Valencia (1-1), cediendo finalmente el liderato

Molestias en el pasado

El descanso de partidos se convertirá en trabajo en los entrenamientos. "Una pauta de trabajo específico de musculación y prevención" diseñado para que Luis Suárez "resuelva las molestias que tiene en la rodilla derecha". De nuevo esas molestias y en esa rodilla que ya surgieron en la pretemporada del año pasado, y que forzaron entonces al delantero a una primera tanda de cuidados definidos para él.

Suárez no se había quejado hasta ahora de ninguna dolencia. De hecho, su masiva participación demuestra que, desde el punto de vista médico, estaba apto. Pero no es menos cierto que su rendimiento dista mucho del esperado, lo que ha dirigido la mirada hacia su estado físico, abonando la teoría de que empieza cada temporada falto de forma. Dicho de otra manera: que le cuesta coger el tono.

Precedente en la misma rodilla

Solo tres goles ha aportado el delantero centro del Barcelona en un inicio pobre, tan solo superado en la temporada anterior al anotar dos dianas (en tres partidos menos) y cuando arrastraba las primeras molestias en la rodilla. Los números al final de cada campaña azulgrana le colocan en su sitio. Aportó 25 tantos en la primera (14-15) pese a perderse dos meses y medio por la sanción de la FIFA,dos meses y medio por la sanción de la FIFA dobló resultados en la siguiente (51 goles en la 15-16) y bajó a 37 y 30 tantos, respectivamente, en las dos últimas.

La puesta a punto en Sant Joan Despí se repite por segunda vez y remite al precedente del 2017. Suárez se lesionó en la Supercopa frente al Madrid el 16 de agosto y le diagnosticaron "una distensión en la cápsula posterior de la rodilla derecha". A pesar de eso, voló hacia Uruguay para jugar con la selección.

Encierro en Sant Joan Despí

Reapareció el 9 de septiembre ante el Espanyol. Marcó. Siguió jugando, pero condicionado por un quiste sinovial que se le formó en la articulación y que iba minando su rendimiento, hasta que paró en otra interrupción de la Liga. En la de noviembre. "La lesión era soportable pero, a la vez, me hacía jugar con alguna sensación de dolor", explicó.

Suárez se olvidó de Uruguay y se encerró en Sant Joan Despí para recuperarse mediante un plan médico que disipara, además, la amenaza del quirófano. El día que reapareció (18 de noviembre) endosó un doblete al Leganés.

"Estoy recuperado ya", anunció una semana más tarde. Hasta entonces (25 de noviembre) había marcado 5 goles en 17 partidos. En diciembre (5 partidos) marcó 5 goles.