Las balsámicas palabras de Guardiola sobre el Barça

Cuando flaquea la confianza y asoman las dudas, un sector nada desdeñable del barcelonismo dirige su mirada hacia Pep Guardiola en busca de orientación deportiva y guía espiritual. Desde Manchester, desde Múnich o desde Nueva York, el faro de Santpedor siempre tiene un haz de luz para iluminar el camino de esas atribuladas almas azulgranas. La incertidumbre generada por la reciente victoria del Real Madrid en la final de la Champions parecía aconsejar ahora una nueva consulta al oráculo. Y las palabras de Guardiola fueron todo un bálsamo: el Barça, sentenció, "es el mejor equipo de España".

"Si en todo el año el Barça solo ha perdido un partido y ha ganado la Copa por cuarta vez consecutiva, es porque ha hecho un curso espectacular, brutal", declaró el técnico del sextete, que participó en la Mar Bella en un acto de la Fundación Cruyff, de la que es patrono. "Si al empezar la temporada me preguntas qué quiero como entrenador, te diría que ganar la Liga, la Bundesliga, la Premier… Porque de los 11 meses que dura la competición, vives nueve de felicidad continua".

No restó méritos Guardiola a la gesta del Madrid, que prueba, dijo, que también es "un equipo espectacular". "La Champions es una competición muy dura y complicada donde estar dentro o fuera depende de muchas cosas. Cuando uno consigue tres seguidas, y cuatro en cinco años…, es para quitarse el sombrero". 

Día grande del cruyffismo

El técnico del Manchester City fue uno de los participantes ilustres en el llamado Open Day de la Fundación Cruyff, una jornada anual consagrada a la integración de los niños con necesidades especiales a través del deporte. Es también el día en el que el núcleo duro del cruyffismo –un microcosmos variopinto en el que lo mismo topas con un magnate de la comunicación (Jaume Roures) que con una monja dominica (Lucía Caram), un catedrático masón (Joan Francesc Pont) o una estrella del pádel (Fernando Belasteguín)- se reúne para invocar la memoria del profeta desaparecido hace dos años y honrar su legado; el personal, vehiculado a través de esa fundación que trabaja con 300.000 niños repartidos en 20 países, y también el deportivo. Si es que no son lo mismo.

"Para mí, Cruyff es una manera de entender la vida", afirmó Eusebio Sacristán. "Era una forma de vivir, de hacer las cosas, de jugar al fútbol", señaló Joan Laporta. "Nos enseñó un mundo nuevo que nunca habíamos visto", apuntó Guardiola, a quien muchos ven como el depositario de la llama y el guardián del estilo. Si el Barça, añadió, "sigue sabiendo qué quiere hacer y cómo hacerlo, seguirá siendo el mejor equipo del mundo. Gane la Champions o no la gane".