Barça, el equipo que todos recitan de memoria

Me contaba el otro díaPedro Martínez de la Rosa, sentado en la terraza del Nàutic de Portocolom, en Mallorca, que cuando él llego a McLaren se comió mucha mierda, con perdón. Le tocó hacer todo lo que las estrellas, en aquel momentoKimi Raikkonen,David CoulthardyAlex Wurz,no querían hacer. Como, por ejemplo, pasarse el día en el simulador o jugándose la vida, así como suena, probando un bólido, el MP4/18 fallido, tan malo, tan peligroso, que nunca llegó a debutar en el Mundial después de que PDLR se llevase seis sustos de muerte, ¡de muerte!, en los trazados en los que lo probó. «Pero si quería mejorar en el equipo, si quería escalar en su consideración y ganar protagonismo, debía de asumir esos riesgos», decía.

Pensaba en eso cuando repasaba la prensa del día en la que, por ser primero de agosto, parecía el mundo al revés, las perdices disparando a los cazadores:Vettel, que le lleva 85 puntos (más de tres victorias) al segundo del Mundial de F-1, igual no repite título, igual;Kobe Bryant igual se viene al Palau o a Turquía a jugar la Liga, ya te digo;Michael Phelps, que viene de un año sabático y gana siete medallas en el Mundial, es unpedorro, no veas;Usain Boltdice que se quiere dedicar al fútbol, a correr la banda será; y, por descontado, paren el mundo que yo me bajo porqueNeymar,Thiago yDeulofeuson la octava maravilla del mundo, nada que ver con lo que, hasta la fecha, ha generado la admiración de medio mundo y que, si no voy equivocado, se llaman:Valdés,Alvés,Piqué,Puyol,Abidal,Busquets,Xavi,Iniesta,Pedro,Messi yVilla.

Anda que no les falta nada para llegar ahí. Comonoticióndel verano está muy bien, como portada en días aburridos es fantástico, como complemento del mejor equipo del mundo en mucho tiempo (¿de siempre? Vale, pues de siempre) es alentador, pero quisiera recordarles, solo como anécdota, que en el Europeo sub-19, dondeDelofeuse colgó brillantemente el oro, el mejor fue uno del Madrid (Sarabia, vendido al Getafe, ¡gran ojo el deMourinho!) y el máximo goleador, otro del Madrid (Morata, ¡mejor ojo de Mou!).

Ya lo dijo Zubi hace unas semanas. Los buenos, los buenos de verdad, los que nos han traído hasta aquí están de vacaciones. Y volverán. Y son nuestros. Esos, y no otros, son los que valen 100 o 200 millones. Es el equipo de memoria. Ya están aquí. Los demás, a la cola. Y a aprender.