entrevista con el grupo

Els Amics de les Arts: "Queríamos ser más valientes y gamberros"

Canet Rock

Sábado, 5 • 22.00 horas.

NÚRIA MARTORELL
BARCELONA

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Els Amics de les Arts se consolidan a golpe de instinto e inspiración. Facturando cada vez mejores canciones. Y prodigándose a través de las nuevas tecnologías -en el 2005 fueron pioneros en distribuir maquetas y discos gratis en internet y acaban de lanzar una nueva aplicación de móvil- y en muchos, muchísimos festivales. Mañana presentarán Només d'entrar hi ha sempre el dinosaure en el Canet Rock. Y les espera un verano hiperactivo: el 11 de julio actuarán en Olot, el 12 en el festival Sons del Món, el 19 en la Acampada Jove, el 25 en Cap Roig (entradas agotadas), el 28 en el Grec (en el mismo anfiteatro donde triunfaron con su anterior álbum), el 2 de agosto en ETC de Tarragona, el 14 en Portaferrada, el 16 en Peralada…

-Pero se termina el calor y el espejismo se esfuma, ¿verdad?

 -Ferran Piqué: Sí. Por eso vamos a organizar nosotros mismos un ciclo de conciertos en nuestro barrio, en Sant Andreu, que se hará fuera de la temporada estival cuando actuar es más complicado.

-Dani Alegret: Se relaciona música con manga corta. Parece que en invierno cueste programar. Y la legislación para tocar en bares no ayuda para nada.

-Eduard Costa: Barcelona sigue enfocando su propuesta de festivales al turismo. Y nos gustaría que la oferta creciera más allá de los meses de calor. En Madrid, en cambio, hay más actividad. En cualquier bar o restaurante hay música en directo.

-Precisamente en Madrid acaban de recibir el Premio de la Música Independiente (UFI) al mejor disco en catalán por el directo Tenim dret a fer l'animal. Y esta misma distinción la lograron el año pasado por Espècies per catalogar.

 

-D. A.: Ganar este premio dos años seguidos y con dos discos tan diferentes… Les estamos muy agradecidos al jurado y a nuestros seguidores. Además, nos pasó una cosa muy emotiva en Madrid. Vino una pareja catalana expresamente porque él quería pedirle en matrimonio durante nuestro concierto. Nos explicó que nuestra música les ha servido de banda sonora a su historia de amor. Y acabó haciéndole una petición de mano en toda regla.

-¿Supongo que ella aceptó?

 

-D. A.: Sí, sí. Claro [risas].

-En este nuevo disco han dejado de lado los vientos, los violines y los violonchelos. Y sorprenden dándole protagonismo al órgano Hammond e incluso a la distorsión.

 

-Joan Enric Barceló: Si quieres que el caldo te salga diferente has de poner ingredientes diferentes. Quizá otro día recuperamos estos instrumentos. Quién sabe. La idea era que pudiéramos reproducir el disco luego en los directos. Dar un paso adelante como instrumentistas y cantantes.

-D. A.: Queríamos ser más valientes y gamberros. Distorsionando órganos, desafinando pianos expresamente. Sin miedo. La misma voz distorsionada de Joan Enric al inicio de El mite de Prometeu es algo que antes no nos hubiéramos atrevido a hacer.

-La banda nació en el 2005 ya con un disco autoeditado (Catalonautes). Desde entonces, y como buenos amigos de su arte, controlan todo lo que concierne al grupo.

 -D. A: Tenemos una máxima: si algo no funciona, que no sea por nosotros. Nos gusta controlar y supervisar todo muchísimo. No dejar nada en manos externas. Estar encima de nuestro producto, que es lo que tenemos. Es nuestra responsabilidad.

-F. P: Aunque algo aprendes a delegar. Ahora lo hemos hecho en el tema del booking con Project, porque habrá sitios donde no nos contrataban porque no llegamos.

-¿Por qué todas las nuevas canciones hablan de pérdidas?

 -F. P.: Joan Enric se ha encargado de las letras y cuando las escuché, pensé ¿le habrá pasado algo? Porque sí, habla de muchas cosas perdidas. Pero no hay drama en ningún momento ni es un disco negativo, ¿eh?