Joan Dausà: "La muerte pone en su sitio los problemas"

Joan Dausà (Sant Feliu de Llobregat, 1979) concibe su carrera como un "universo global" en el que la música y el cine están entrelazados. Su disco de debut, 'Jo mai mai', le propició una gira de más de 80 conciertos que remató en el Palau de la Música. Hoy publica el álbum 'On seràs demà?'. Él estará mañana ensayando con su banda.

-¿Cómo lo ha hecho para en solo dos años formar parte del star system musical catalán, ganar un Gaudí por la banda sonora de Barcelona nit d'estiu, estar en el cartel del Canet Rock...?

-A mí no me parece tan poco dos años. Los he vivido día a día, de manera intensa e incluso analítica, decidiendo qué debía y podía hacer en cada momento. Porque hay esta parte de análisis sobre cómo llegar a la gente. Y quizás es una de las claves de esta velocidad de mi carrera que yo no veo. He ido reinventándome continuamente.

-Y de nuevo, de la mano de la compañía independiente audiovisual  Cameo, que montó la discográfica por usted y sigue siendo el único cantante de su catálogo. ¿Hasta qué punto ellos sugieren, proponen?

-Son grandes cómplices, pero todo son ideas mías. Ellos aceptan el juego. Yo hago la propuesta, pensando en que cuanto más personal y cerca del mundo del cine esté, mejor.

-La primera y la última canción de este segundo álbum son un guiño al primero. ¿Por qué?

-Una de las cosas que me sorprendió del primero es la conexión que tuvo con el público, cómo la gente cogía las canciones y las adaptaba a su vida. Analicé de qué hablaba en ese primer disco y me propuse un segundo más intenso y vital. Por eso la primera canción del nuevo, 'Més enllà', conecta con 'M'hauria agradat': saltas, vuelve a empezar. Aunque la gente se asuste, encontrarás lo que buscas. Es una declaración de intenciones: hay que luchar por lo que quieres. Y 'Epíleg' alarga mi historia con Judit de 'Jo mai mai'. Es una conversación entre el narrador y ella en la que no se desvela tampoco qué pasa al final.

-Hombre, ¡lo suyo sería que acabara bien!

-(Risas) La producción de la canción da alguna pista. Porque la letra es triste, vale, pero la producción es alegre, así que parece que acaba bien, sí. Lo mismo que el video-álbum a modo de cortometraje. Siempre busco vínculos con el cine. La protagonista, Aina Clotet, acaba riendo para quitar hierro. ¿Sabes que nos llegamos a plantear hacerlo en plan comedia? Ella sería Catwoman y yo Batman. Pero pensé que despistaría demasiado.

-La atmósfera del disco está muy conseguida. ¿Tenía claro que quería volver a grabar en el estudio Blind Records de Santos & Floren?

-Siempre he estado con ellos: en el primer disco, en la música del filme. Forman parte de mi sonoridad y propuesta. Iba allí y les decía "ésto es lo que tengo, a piano y voz". Y la producción de Santos, Floren y Axel Pi hacía que las canciones crecieran.

-Además de Alex Pi, el resto de Sidonie participa en la pieza 'Quan ens creuem'. ¿Cómo se terció?

-Por la proximidad con Axel. Era una colaboración natural. Cada vez coincidimos más y en una de estas les enseñé tres canciones, pregunté qué les parecían, les sugerí una en concreto y así surgió.

-Con la misma fluidez, supongo, que la colaboración con el realizador Dani de la Orden ['Barcelona, nit d'estiu'], que firma este original videoclip/cortometraje con trozos de todas las piezas del disco.

-Me gusta esta concepción sin límites: ¿Es música o es cine? ¿Es un disco, una gira? En esta interesante indefinición pasan cosas también interesantes. No sabes si es una banda sonora, un conjunto de temas pop... Me gusta crear un imaginario, un universo detrás de todo lo que hago. Una personalidad que se carga todos los miedos de si después de 'Jo mai mai' haría lo mismo. He conseguido que la gente no busque un 'Jo mai mai' 2.

-¿Y tenía ese miedo de repetirse?

-No, pero la gente me lo pregunta. Sabía que tenía que ser más potente, más interesante, más cercano a mí.

-La canción 'Que no s'acabi mai' empieza: «En la línia de sortida/ faig estiraments...» Podría encajar perfectamente en el disco de Manel 'Atletes, baixin de l'escenari...'

-Es verdad. Toca correr. He llegado a la conclusión de que todos estamos corriendo [risas].

-En 'Teo va a l'escola' sorprende cómo combina la ternura de su entonación [canta con voz infantil] con la crudeza de la letra.

-Escuché mucho a Eels, que tiene este sonido casi infantil y melancólico, que te acaricia, e historias duras basadas en su vida. Y me pareció interesante este contraste.

-Y en 'Quan soni la tendresa' habla directamente de la muerte. ¿Piensa mucho en ella?

-Hablo más que pienso. La muerte pone en su sitio a los problemas, ¡nos pone a todos en su sitio!. A ti, a tus relaciones... Te hace plantear qué quieres tener y con quién; si estás viviendo lo que quieres vivir. Y también es un homenaje a la canción 'La tendresa' de Lluís Llach. Pase lo que pase, podemos seguir conectados con momentos sublimes como escuchar una canción así de preciosa.

-¿Quién era Joan Dausà antes de 'Jo mai mai'?

-Lo digo orgulloso: vengo del mundo esplai. De estudiar Dirección y Administración de Empresa en la Pompeu Fabra, que me aporta esta parte más racional y analítica. Cuando no compongo, pienso y me entiendo como un producto, con sus fortalezas y debilidades. Formo parte de una estrategia bien entendida. Monté varios grupos, como Anar Fent. Se me despertaron las ganas de hacer teatro, estudié en el Institut del Teatre, pasé por series de tele, el Club Super 3, hice teatro con Broggi... Y supe que quería hacer música y cine.

-Pero, ¿hay antecedentes artísticos en su familia?

-Solo mi abuelo, Narcís Dausà Dausà. Un poeta, no conocido por el gran público ni por el mediano. Tengo sus publicaciones guardadas con un lazo. Y no descarto rescatar algunos de sus versos.