LA F-1 ATERRIZA EN EL DAKAR

El campeonísimo Fernando Alonso salta a la arena

Alonso, del asfalto a la arena. El piloto prueba suerte en el Dakar

Alonso, del asfalto a la arena. En la foto, el piloto, en el interior de su Toyota, en el Rally de Marruecos. / periodico

Miguel Martínez

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Nadie le podrá negar su valentía, no la de jugarse la vida, que también, sino la de poner en juego su prestigio labrado en la F-1 con incursiones en otras especialidades del motorsport. Y no le ha ido mal. Dejó la F-1 en el 2018 y arrancó 2019 con un triunfo en Daytona, al que siguió la segunda victoria en las 24 Horas de Le Mans y el título en el Mundial de Resistencia. No hay nadie en la Salón de la fama de la Federación Internacional, con títulos mundiales en tres categorías diferentes del automovilismo (kárting, resistencia y F-1).

Ahora Fernando Alonso sube un escalón más, un salto casi al vacío, para probar fortuna en el Dakar, sabiendo que no puede haber otra especialidad más alejada de su zona de confort. Y lo mejor del asunto es que, aunque 'a priori' deber ser imposible para él ganar, nadie se atreve a decir que no pueda conseguirlo.

Demasiado alejado de la F-1

'El nano' parece de otra época, de aquellos años 60 o 70, en los que no era infrecuente ver a un campeón de la F-1 en la Indy o en Le Mans. El asturiano será el primer campeón de F-1 que afronte el Dakar. “Si te pones a mirar, no hay nada más distinto y que tenga menos que ver con la F-1, la resistencia o los circuitos que ir dando saltos con un 4x4 por las dunas”, explica el asturiano, “pero eso me hará mejor piloto. Y te digo algo más: me hará mejor persona”.

Alonso tiene que enfrentarse a una nueva realidad en su vida: hay un puñado de pilotos más rápidos que él en este Dakar, y no será el piloto de referencia ni siquiera de su equipo, Toyota. Todo lo contrario, parece el cuarto de los cuatro que forman el organigrama inicial por detrás de Al-Attiyah, De Villiers o Ten Brinke. La organización del rally no puede estar más feliz con el refuerzo mediático que supone la participación de Alonso, aunque no le ve en el ramillete de favoritos. “Tiene que aprender a ser humilde”, explica David Castera, director de la prueba y excopiloto de ganadores del Dakar como Stéphane Peterhansel y Cyril Després.

"No hay nada más alejado de la F-1 que ir dando saltos por las dunas, pero el Dakar me hará mejor piloto, seguro"

Fernando Alonso

— Bicampeón de F-1 y poseedor del Mundial de Resistencia

“Si quiere avanzar al nivel máximo, tiene que aceptar estar detrás, en teoría, de pilotos menos buenos que él. Esa es la primera cosa. Pero pienso que puede ganar una etapa antes del final del Dakar, en la segunda semana puede hacer algo especial. Pero tendrá que esperar y tomarse la primera semana como aprendizaje. Después, creo que tendrá opciones, sobre todo con Marc Coma, (su copiloto y cinco veces ganador de la prueba en moto), que conoce muy bien el rally y le va a ayudar mucho”, insiste Castera.

Esa parte la tiene muy asumida. “Mentiría si digo que estoy al nivel de especialistas como Peterhansel, Sainz o Nasser. Creo que es imposible alcanzar ese nivel en seis meses de preparación”, asume Alonso y cita un ejemplo devastador: “Sebastian Loeb, el mejor piloto de rallys de la historia, realizó varios intentos sin conseguir el triunfo”. Su estrategia es clara según desveló en una conversación con EL PERIÓDICO, mientras entrenaba en su circuito de kárting un día antes de viajar a Arabia Saudí. “Por velocidad pura, no hay ninguna posibilidad. Solo queda tener cuidado en la primera semana, que los mejores tengan algún problema que les reste tiempo, y ver qué pasa con la navegación o las dunas de la segunda parte”.

Habrán sorpresas, seguro

Su éxito en el mundial de resistencia le vendrá mejor que todos sus años en F-1 para encarar una 'raid' como el Dakar: "Quizás lo que más me pueda ayudar es el nivel de preparación o de concentración que tengo de tantos años de carreras, como las 24 horas de Le Mans. En el Dakar son etapas de 5 o 6 horas, con diferentes terrenos y ritmos. Es fácil cometer un error porque siempre aparecerá un árbol, una piedra o una zanja. Siempre hay pequeñas trampas durante seis horas y necesitas estar concentrado al cien por cien”, insiste el asturiano.

Los favoritos como Sainz, Peterhansel, Al-Attiyah, De Villiers o Roma coinciden en señalar que, en su primera participación, no tiene casi ninguna posibilidad, “pero Alonso está lleno de talento y esto es el Dakar, una aventura, donde puede pasar cualquier cosa”, indica su amigo Sainz.