REGALO DE RED BULL
Márquez probará un F-1 después del Gran Premio de Italia de MotoGP
Emilio Pérez de Rozas
Periodista
Licenciado en Ciencias de la Información por la UAB. Hijo de Carlos Pérez de Rozas, sobrino de Kike y Manolo Pérez de Rozas, integrantes de una auténtica saga de fotoperiodistas. Trabajó en Diario de Barcelona, fundador de El Periódico de Catalunya en 1978 también formó parte de la redacción en Catalunya del diario El País. Colaborador del diario deportivo Sport y vinculado al departamento de Deportes de la cadena COPE, que dirige Paco González. Emilio suele completar muchas de sus informaciones con sus propias fotos, en recuerdo a lo aprendido junto a su padre y tíos.
Emilio Pérez de Rozas
Los grandes pilotos de motos siempre, siempre, acaban, tarde o temprano, pilotando un monoplaza de F-1. Marc Márquez y Dani Pedrosa, patrocinados a nivel personal por Red Bull, acaban de recibir la oferta del todopoderoso propietario de esa bebida, dueño de una de las mejores escuderias del Mundial de F-1 para que, tras el Gran Premio de Intalia, que se disputará, la próxima semana en Mugello, pueden probar uno de los antiguos Red Bull del tetracampeón alemán Sebastian Vettel (2010, 2011, 2012 y 2013), el equipado con un motor Renault V8, según ha informado la web Motorsport.com.
Márquez y Pedrosa, que, probablemente, esta misma semana acudan a las instalaciones que Red Bull tiene en la localidad británica de Milton Keynes para hacerse el asiento a medida, paso previo importantísimo a poder pilotar un coche de esas prestaciones, seguirán los pasos de Valentino Rossi, que, en 2014, pilotó un Ferrari y de Jorge Lorenzo, que, en 2016, gracias a Mercedes pudo conducir uno de los coches de la ‘estrella plateada’ de Lewis Hamilton. Eso sí, el primero de todos fue el australiano Mick Doohan, que probó un Williams.
Dietrich Mateschitz, que esta detrás con su dinero y patrocinio del equipo KTM Red Bull de MotoGP, la firma que, dicen, sueña algún día con poder hacerle una suculenta oferta a Márquez, también ha invitado a esta cita, más de imagen, de marketing que competitiva, al campeonísimo de motrocross Tony Cairoli.
Márquez ya tuvo ocasión de probar un F3 en Motegi, con ocasión del Honda Racing Day, el pasado diciembre, cuando dijo, además, que no tenía en mente pasarse a la F-1. Y eso que hubo un tiempo en que los grandes pilotos venían del motociclismo. Incluso Tazio Nuvolari comenzó en dos ruedas. Está John Surtees, el único que ha sido campeón en dos y cuatro ruedas, pero también destacaron campeones como Johnny Cecotto, Mike Hailwood y Bill Ivy.
Márquez no es sólo es un crack a los mandos de una MotoGP. Recientemente, Marc hizo sus pinitos con un Honda Civic Type R de 320 CV. Se le vio disfrutando de lo lindo en el circuito del Jarama. Y, repito, en diciembre pasado, fue la estrella en la fiesta anual de Honda, en Motegi, donde probó todo tipo de vehículos, incluido un monoplaza de la F-3 japonesa. En ese mismo evento, Márquez compartió protagonismo con el japonés Takuma Sato, que acababa de ganar las 500 Millas de Indianápolis en las que participó Fernando Alonso, ausente ese día en el trazado japonés, Stoffel Vandoorne y Jenson Button y también Pedrosa.
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