Tu coche tiene un botón 'mágico' y no lo sabes: "Puedes deshacer el accidente"

Los coches siguen incorporando funciones de todo tipo, que ayudan a facilitar la conducción responsable y a asegurar la comodidad del conductor y sus acompañantes. Esta evolución se aprecia en los botones del salpicadero del vehículo, que en cuestión de décadas se han multiplicado y, consecuentemente, han dado lugar a que los usuarios desconozcan algunas de sus finalidades y pregunten por redes sociales.

Precisamente, eso es lo que una usuaria pregunta en una publicación de Facebook, a lo que otro internauta responde bromeando: "Si el automóvil tiene un accidente, puedes deshacer el accidente haciendo clic en ese botón". La captura de pantalla de esta conversación acumula más de 6.000 'me gustas' en Twitter en apenas unas horas.

Recirculación del aire: ¿para qué sirve este 'botón mágico' del coche?

'Recirculación del aire'

Entre los modos del aire acondicionado se encuentra un gran desconocido como la 'recirculación de aire' (símbolo de un coche con una flecha en su interior). Esta opción permite seleccionar desde dónde se recoge el aire que entra al sistema de ventilación y por dónde se dispersa. En otras palabras, se puede elegir si el aire que se utiliza es del exterior o el interior del automóvil.

Se debe activar cuando se circula por zonas con alta contaminación, malos olores, con polvo o humo. Así pues, por medio de la recirculación se podrá continuar utilizando el aire acondicionado sin poner en riesgo la calidad del aire dentro del vehículo.

Asimismo, tal como expone el portal especializado Neomotor, este sistema también resulta realmente útil en verano o jornadas con altas temperaturas. En estos casos, es recomendable activar el aire acondicionado y, posteriormente, encender la recirculación cuando comience a salir aire frío. De esta manera, no solo se consigue reducir la temperatura dentro del coche, sino que se ahorra combustible. Asimismo, este proceso puede utilizarse a la inversa en épocas de frío como invierno, calentando el coche con la calefacción y activando la recirculación cuando ya se ha alcanzado la temperatura deseada.

Con todo, los expertos recomiendan no mantener este modo activo más de diez minutos, ya que a partir de dicho período se debe renovar el aire del interior del vehículo.