MUNDIAL DE MOTOGP

Pol Espargaró se emociona al subirse a su nueva Honda

El piloto catalán, que logró cinco podios, en el 2020, con KTM, sueña con medirse con Marc Márquez

"Es más estrecha de lo que creía, pero preciosa, ¡preciosa!", señala 'Polyccio' al subirse a la RC213V

La Honda de Pol Espargaró

La Honda de Pol Espargaró. /

Emilio Pérez de Rozas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Pol Espargaró (Granollers, 10 de junio de 1991), quinto del Mundial-2020 de MotoGP tras Joan Mir (Suzuki), Franco Morbidelli (Yamaha), Alex Rins (Suzuki) y Andrea Dovizioso (Ducati), cinco terceros puestos en Estiria, Emilia Romagna, Le Mans y Valencia (2), acaba de recibir la visita de los Reyes Magos con dos días de antelación. El equipo Repsol Honda le ha dejado subirse a su nueva RC213V con la que debutará está temporada y, tras un breve entrenamiento por las montañas de Andorra, se ha encontrado “la moto de mis sueños” en la terraza de su casa andorrana.

El gran reto

‘Polyccio’, que arde de deseos de probarla cuanto antes (“¿no podéis dejarla ya aquí para que me acostumbre a ella?”), comentó que le parecía más estrecha de lo que pensaba y, desde luego, con su flamante nº 44, hecho a trocitos de piedras, ha asegurado que le parece “la moto más bonita del mundo y, por supuesto, la moto que todos los pilotos de la parrilla de MotoGP persiguen”.

El pequeño de los Espargaró, que como todo el ‘paddock’ de la categoría reina está deseoso de conocer buenas noticias de su nuevo compañero, el ocho veces campeón del mundo Marc Márquez (“tengo mucho que aprender de él, sobre todo saber qué hace con esa moto para ser tan veloz”), ha asegurado, a lo largo del 2020, tras fichar por el equipo Repsol Honda, que es un auténtico reto.

“Entrar en ese equipo ya es, de por sí, un reto, una motivación extra y, desde luego, después de correr para Yamaha y KTM, tenía unas ganas tremendas de correr para Honda. Sé que esta moto me hará más fuerte o me destruirá, lo sé”, señaló, poco después de confirmar por Honda, que era un autentico reto.