Izan Guevara, el campeón de la nueva generación

“Tiene un futuro tremendo, inmenso, porque lo hace todo muy fácil, porque piensa sobre la moto y porque, ya con 16 años y hasta con 15, el pasado año, cuando ganó la European Talent Cup, ha sabido manejar fantásticamente la presión en la pista, cuando se estaba jugando el título mundial júnior contra pilotos más expertos que él”.

Jorge Martínez ‘Aspar’, que algo sabrá de esto, comentaba ayer, minutos antes de que anunciase su ascenso al equipo del Mundial de Moto3, la personalidad de un muchachito mallorquín, Izan Guevara, de 16 años, nuevo campeón del mundo júnior de Moto3, el pasado domingo, en Cheste (Valencia).

Guevara, cuyo ídolo es Marc Márquez, que, por cierto, tampoco reaparecerá este fin de semana en Valencia (y veremos si ya se ha despedido del Mundial-2020), podría ser considerado, junto a Xavier Artigas y Pedro Acosta, segundo y tercero del Mundial Júnior, el líder de la nueva generación del motociclismo español. Y, en el caso de Izan, el heredero de la saga mallorquina marcada por el pentacampeón Jorge Lorenzo, el campeón Joan Mir, el desaparecido (y que iba para campeón) Lluís Salom y el no menos eficaz Augusto Fernández.

"Detrás de un éxito así hay mucho que agradecer a muchos. Gracias a los que me han ayudado a llegar hasta aquí"

Izan Guevara

— Campeón del mundo júnior de Moto3, con 16 años

Guevara ha realizado un final de temporada impresionante, logrando estar en el podio en las últimas ocho carreras del campeonato. Ganó en Jerez, consiguió un triplete de victorias consecutivas en Aragón, venció el sábado en Valencia y logró acabar tercero –lo que necesitaba- en las dos últimas pruebas de Cheste. Eso sí, hay que recordar que Guevara (así son las carreras), se aprovechó de que, en la primera prueba del triplete final de Valencia, Artigas, que era su adversario y favorito al título, tuvo la desgracia de que se le parase la Honda en la parrilla de salida y, por tanto, no pudo puntuar en la primera cita valenciana.

Dos títulos consecutivos

“Solo puedo decir que no sé qué contar, que decir, pues este título es increíble”, señaló Guevara, mientras celebraba con gaseosa (son menores de edad y no pueden descorchar cava) la conquista del cetro mundial júnior. “El año pasado, en mi primer año en la Europea Talent Cup, logré el título y este año, siendo ‘rookie’ del Mundial Júnior CEV de Moto3, consigo el título también, gracias al equipo de Jorge Martínez ‘Aspar’ y la ayuda inestimable del excampeón Nico Terol y Gino Borsoi, que me han apoyado durante toda la temporada”.

Guevara ya rodaba, con solo tres años, en su primera moto, que, más adelante, le permitiría inscribirse en la Cuna de Campeones, el campeonato de niños valenciano que dirige con maestría el excampeón Julián Miralles, pasando por todas las cilindradas inferiores, hasta proclamarse subcampeón de PreMoto3 y acceder a la European Talent Cup. El pasado año, Guevara ganó, haciendo un montón de demostraciones en la pista y logrando seis triunfos, lo nunca visto, el campeonato European Talent Cup, lo que le permitió que Aspar se fijase en él y lo fichase para su equipo del campeonato del mundo Júnior de Moto3, que acaba de ganar. Solo Guevara ha ganado, un año tras otro, los dos certámenes, Talent Cup y Mundial Júnior.

"Sabía que Izan lo haría muy bien este año, pero ganando el título nos ha roto los esquemas a todos"

Nico Terol

— Campeón del mundo de 125cc (2011) y asesor del 'team Aspar'

Es evidente que, como mallorquín que es, Guevara pasó por la escuela de Chico Lorenzo, el gran papá de (casi) todos, donde estuvo unos tres años, para, a continuación, ser tutelado por la Federación Balear de Motociclismo, con Miguel Ángel Poyatos y Dani Vadillo como principales mentores. “Hay mucho trabajo en la sombra que no se ve”, puntualizó, en su día, el propio Guevara en una charla con Motorbike Magazine. “Tanto la Federación como Miguel Ángel, su hijo Ángel, Vadillo, Joan Munar y Marc Horrach me han ayudado muchísimo. Detrás de un éxito así hay mucho que agradecer a mucha gente, así que gracias a todos los que me han ayudado a llegar hasta aquí”.

Nico Terol, campeón del mundo de 125cc en el 2011 y asesor de Aspar, fue de los primeros que se enamoró de Guevara. “A mí Izan ya me encantó, y mucho, en la Talent Cup, tanto que, el año pasado, estuve dándoles la paliza a Jorge y a Gino (Borsoi, la mano derecha del campeón de Alcira) para que lo fichásemos para este año. Estaba seguro que Izan lo haría de maravilla este año. ¿Salir campeón? ¡Ni hablar! Nos ha roto los esquemas a todos. Tiene un talento bestial y es un magnífico muchacho”.

"Guevara lo hace todo fácil, tiene un talento natural, un don y aún será mejor, pues tiene mucho que aprender"

Jorge Martínez 'Aspar'

— Propietario del Openbank Team

Ni que decir tiene que Guevara agradece a Aspar, a Borsoi y, sobre todo, a Terol todo lo que han hecho por él. “Lo diré, aunque suene a topicazo: Terol es mi hermano mayor. Es una persona con la que flipas cuando le conoces. Nico me da mucha serenidad, sabe gestionar muy bien los nervios de los pilotos, interpreta muy bien tus pensamientos, tus reflexiones, y eso es vital minutos antes de colocarte en la parrilla. Esa relación fue muy tranquilizadora cuando empecé mal en Estoril e ideal cuando todo nos iba rodado en el triplete que logré en Aragón y, ahora, en Valencia”.

La serenidad de Guevara

Ni que decir tiene que Guevara está como loco al saber, desde esta misma mañana, que ya es piloto oficial del Mundial de Moto3 en las filas de su equipo del alma, el ‘team Aspar’. Izan, que había ganado el título mundial júnior, sabía que sus dos acompañantes en el podio final, Xavier Artigas (2º) y Pedro Acosta (3º), ya tenían su plaza asegura entre los grandes, mientras él necesitaba un nuevo empujón de Aspar para dar el gran salto. “No puedo estar ni más feliz, ni más agradecido a Jorge por las oportunidades que me sigue dando”, comenta Guevara.

 “No es fácil, no, tener 16 años, ser debutante en el Mundial Júnior y pelear, a brazo partido, con ocho o nueve pilotos, todos con más carreras que él, por la victoria, el podio y el título, es digno de admirar”, sigue explicando Aspar sobre el tremendo final de campaña del joven mallorquín. “Al final, cuando ya era líder, debía correr con mucha cabeza y sin poder arriesgar todo lo que le hubiese querido. Es un piloto con una naturalidad y un don muy grande, mucho, que hace las cosas con muchísimo talento y muy fácil, y tiene un futuro impresionante, porque le queda aún mucho por aprender, pulir muchos detalles y, sobre todo, pelear con los grandes”.