EL GRAN PREMIO DE ARAGÓN

Lorenzo afirma que la Honda actual va contra su pilotaje

Jorge Lorenzo, en el boxe del equipo Repsol-Honda, en Motorland (Alcañiz, Aragón).

Jorge Lorenzo, en el boxe del equipo Repsol-Honda, en Motorland (Alcañiz, Aragón). / periodico

Emilio Pérez de Rozas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El piloto mallorquín Jorge Lorenzo (Honda), pentacampeón del mundo de motociclismo, compañero de equipo del catalán Marc Márquez (Honda), heptacampeón del mundo y a dos pasos de conquistar su octavo título mundial, ha señalado a las lesiones y, muy especialmente, al cambio de moto que Honda ha hecho del 2018 al 2019, como motivos por los que está atravesando una de las peores temporadas, sino la peor, de su dilatada carrera deportiva.

Lorenzo, de 32 años, ganador de 68 grandes premios, uno de los más grandes vencedores de carreras de la historia del Mundial, arrancará mañana (13.00 horas, DAZN) desde la penúltima fila de la parrilla de salida, al acabar 19º e los entrenamientos definitivos de hoy, teniendo solo por detrás suyo al malayo Hafizh Syahrin (KTM), el checo Karel Abrham (Ducati) y el británico Bradley Smith (Aprilia). Lorenzo (1.49.282 minutos) ha terminado hoy a casi dos segundos del tiempo de Márquez (Honda, 1.47.009), su compañero de equipo que pilota la misma moto, la nueva RC213V.

Cambio de moto, a peor

El pentacampeón mallorquín no ha sabido encontrar explicación alguna a su pésima situación. Bueno, sí, ha seguido insistiendo en las lesiones que ha sufrido desde hace casi un año “que me han impedido rendir a tope desde hace muchos meses”. Y, últimamente, ha decidido criticar también a la fábrica Honda por haber cambiado la moto del pasado año, dotándola de mejor motor para poder competir con la mayor velocidad punta que tenía la Ducati ‘Desmosedici’ del italiano Andrea Dovizioso, lo que obligaba a Márquez a forzar demasiado y sufrir muchas caídas.

"Soy mucho menos feliz ahora que cuando estaba en Yamaha o cuando ganaba carreras con Ducati"

Jorge Lorenzo

— Piloto del equipo Repsol Honda

Eso sí, a preguntas de un periodista austriaco, que le dijo si le estaba dando vueltas a protagonizar una renuncia como la anunciada por el bocampeón francés de Moto2, Johann Zarco, que, al final, ha terminado despedido por KTM MotoGP, Lorenzo dijo que “no me planteó abandonar sino ser un poco mejor cada fin de semana de gran premio, intentar adaptarme a una moto que ni me gusta ni va bien para mi estilo y, por supuesto, a terminar a menos de medio minuto del vencedor de mañana aquí, en Motorland. Es evidente que estoy sufriedo mucho y soy menos feliz que cuando estaba en Yamaha o, en Ducati, ganando carreras, pero siempre he sido luchador y quiero encontrar soluciones”.

Lorenzo ha dicho que su desastrosa situación actual no tiene nada que ver con el primer año malo vivido en Ducati “pues con la Ducati cada vez estaba más cerca del podio”. “Aquí, en Honda”, siguió explicando el mallorquí, “el problema ha sido que me lesioné enseguida y, después de Assen, ya no he podido pilotar a tope, perdí la condición física, perdí la confianza y perdí el ritmo. Con la Honda, nunca me he acercado al podio”.

La desilusión del 2019

Y ha sido después de esta reflexión, cuando Lorenzo ha decidido atacar a Honda por cambiar la moto del año pasado. “Cuando al final de la pasada temporada probé la Honda en Valencia y Jerez, me sentí bien, pese a que no estaba aún recuperado de la rotura del escafoides. Es más, tuve la sensación de que podía adaptar, perfectamente, mi pilotaje, no tan físico como el de Marc (Márquez) a la Honda. Pero, empezamos el año y Honda cambió la moto y, a partir de ahí, todo han sido problemas. Insisto, lo principal, sin duda, han sido las lesiones, pero el cambio de moto, con un motor más potente, me ha afectado muchísimo”.

A lo largo de los últimos meses, Lorenzo fue comentando que Honda debería hacer una moto más fácil para los otros pilotos oficiales: él y Cal Crutchlow. A ese tipo de petición, en principio, Márquez respondió que para intervenir en la construcción y desarrollo de la moto “hay que estar delante”. Poco después, el heptacampeón de Cervera (Lleida) dijo, tras el test de Brno, este verano, que estaba intentando que, a nivel de chasis, la moto del año que viene fuese “más llevadera, no tan difícil de pilotar a tope, para que todo el mundo la pueda conducir”.

“Yo entiendo que la prioridad de Honda haya sido este año dotar a su moto de un motor más potente para disminuir la desventaja que tenía con respecto a la Ducati”, ha explicado hoy Lorenzo, “pero eso ha provocado otros muchos problemas, efectos negatios, que, al menos, para mi estilo más fino de pilotaje, hacen que no puede meter la moto en las curvas y hacerla girar, entre otras cosas”.

¿Que piensa Honda?

Lorenzo le recordó a Honda que “los circuitos suelen tener solo, a lo sumo, dos rectas y de 10 a 15 curvas y, por tanto, este moto me perjudica mucho, ya que para mí no es tan manejable como la que probé al finalizar la temporada pasada”. Respecto a la nueva moto, Márquez ha vuelto a insistir hoy en que es cierto que sufre en las curvas "pero tiene muchímas más cosas positivas que negativas. ¿Qué es una moto muy física?, pues sí, hay que estar en muy buea forma para ir rápido, si no estás en buena forma, es imposible ir rápido".

Nadie sabe qué piensa Honda de la delicadísima situación que atraviesa el segundo piloto de su equipo oficial, aquel que aspira al título de constructores, el que más interesa a la fábrica japonesa, pues es el único con el que puede decorar sus motos de calle con la pegatina “campeones del mundo”, cosa que no le permite el título que Márquez conquista casi cada año. Por tanto, si Lorenzo sigue lejos de los puntos en cada GP, Márquez no se podrá relajar una vez conquistado su octavo cetro mundial, casi con toda seguridad en Tailandia, y deberá seguir buscando la victoria y el podio para mantener a Honda en lo alto de la clasificación de marcas.