Lorenzo se harta del menosprecio de Ducati

La parrilla de MotoGP de los dos próximos años se va carrando poco a poco. Movistar Yamaha seguirá con Valentino Rossi y Maverick Viñales. KTM crecerá, sin duda, con Johann Zarco y Pol Espargaró. Suzuki prescindirá de Andrea Iannone, que será sustituido por Joan Mir, aunque el mallorquín hoy ha bromeado sobre ese fichaje (“poco a poco, ya os diremos cosas”) y mantendrá a Alex Rins. Honda confía ciegamente en Marc Márquez, tetracampeón del mundo de MotoGP, ganador de cuatro de los últimos Mundiales, y parece que se limitará a conceder un año más de tiempo (y ya van 13) a Dani Pedrosa.  Ducati seguirá con Andrea Dovizioso y sustituirá a Jorge Lorenzo por Danilo Petrucci. Y la auténtica bomba, destapada, el pasado viernes, por ‘El Periódico de Catalunya’ es que Lorenzo podría regresar a Yamaha, de la mano de una moto oficial en un segundo equipo de la firma de los diapasones. ¡Ah! y Andrea Iannone formará equipo con Aleix Espargaró en Aprilia.

Ducati se aleja de Lorenzo

Antes de todo eso, que se va gestando a fuego lento, Lorenzo ha querido salir al paso hoy, con enorme contundencia, en el día de las conferencias de prensa del Gran Premio de Italia, que se celebra en el caluroso (de momento) Mugello, de las declaraciones de uno de los máximos responsables de Ducati, Claudio Domenicali, que casi lo despedía de la firma de Borgo Panigale al reconocer, públicamente, que “Jorge es un gran piloto que no ha sabido encontrar la forma de extraer lo mejor de nuestra moto. Una moto que tiene grandes puntos fuertes y también alguna debilidad. Ni él ni nuestros técnicos han conseguido sacar el máximo provecho de su talento. Esto nos hace sentir amargura”.

"En lo único que estoy de acuerdo con 'il capo' de Ducati es que aún no he conseguido sacarle a mi moto el potencial que tiene"

Jorge Lorenzo

— Piloto oficial de Ducati Corse

“Solo puedo decir una cosa”, empezó diciendo el tricampeón mallorquín de MotoGP. “Yo no soy un gran piloto, como dice Domenicali, yo soy un tricampeón del mundo y así me considero. Y, no solo eso, puedo asegurar a todo el mundo de Ducati que voy a seguir aquí este año y pelearé con alegrar la vida a los ducatistas a poder ser con podios y victorias”. Lorenzo solo estuvo de acuerdo en una cosa con su jefe: “La moto tiene un gran potencial, pero aún no lo he sabido extraer”. Y concluyó su contundente respuesta diciendo “el jefe es ‘il capo’ y hay que respetar sus palabras”.

Ni que decir tiene que Lorenzo se deja querer por Yamaha donde el británico Lin Jarvis, su jefe cuando conquistó tres títulos consecutivos para la firma de los diapasones al lado de Valentino Rossi, lo considera uno de los tres mejores pilotos de la parrilla de la categoría ‘reina’. Lorenzo no quiso confirmar ni desmentir que Yamaha prepara una tercera moto oficial para él, en una estructura nueva en MotoGP, patrocinado, casi con toda seguridad, por la poderosa petrolera malaya Petronas, principal sponsor de Mercedes F-1.

Eso sí, Lorenzo confirmó que tanto él como su manager, Albert Varela, están hablando con más marcas y escuderias para encontrar la mejor solución a su futuro. “Lo que sí puedo asegurar es que estaré dos años más en la parrilla de MotoGP. Y, por supuesto, espero hacerlo en una moto oficial y ganadora”.

La respuesta, en Barcelona

Joan Mir, por su parte, tampoco negó las informaciones que lo sitúan en Suzuki al lado de Rins y pilotando la actual moto de Iannone. “Queremos una moto oficial para dar el salto a MotoGP. También, como ya hicimos cuando estaba en Moto3, resolver el tema cuando antes para poder centrarme en buscar mi primera victoria en Moto2, así que, probablemente, tendréis noticias nuestras en las próximas semanas”,

La sensación de todo el mundo es que el Gran Premio de Catalunya, que se disputará en Montemló dentro de dos semanas, podría ser un buen escenario para que Mir confirmase que se va a Suzuki (bueno, en realidad está hecho) y que Yamaha está detrás de resucitar las esperanzas ganadoras de Lorenzo en las dos próximas campañas, las últimas, según comentó el mallorquín, de su vida.