CELEBRACIÓN MULTITUDINARIA

Marc Márquez, el mejor vecino de Cervera

Miles de ciudadanos llenan las calles del pueblo para rendir homenaje al piloto campeón, que les dedica su último título

Márquez sostiene en Cervera un gran dado con los seis títulos que ha ganado.

Márquez sostiene en Cervera un gran dado con los seis títulos que ha ganado. / periodico

Emilio Pérez de Rozas

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"Vosotros sois los que mejor entendeis estas cosas, estos títulos, estas fiestas, pues vosotros sois los que me veis correr, a pie, en moto, entrenarme por estas calles para preparar la temporada y, al final, todos, estáis conmigo en los circuitos y ganáis el título junto a mí. Es más, yo siempre gano por vosotros, así que esta fiesta ¡cómo no! es vuestra, muy vuestra".

Así se expresó Marc Márquez, que pidió a su gente, a la misma que, con solo ocho grados de temperatura, llenó las calles, con miles y miles de fans, con cientos y cientos de banderas del 93, alguna senyera, alguna estelada y multitud de carteles de Big 6, el eslogan del sexto título mundial de este muchachito de 24 años, hablar en castellano "porque es una falta de respeto hacia muchos miembros de mi equipo que no entienden el catalán". Y la plaza del Ayuntamiento de Cervera aplaudió y convirtió el discurso de Márquez en cánticos de "¡campeones, campeones!".

 "Yo siempre gano por vosotros, así que esta fiesta ¡cómo no! es vuestra, muy vuestra" (Marc Márquez).

El flamante tetracampeón más joven de la historia de MotoGP tuvo un escenario a su medida, un escenario en plan estrella de rock, con pasarela y todo (por la que desfilaron fans de medio mundo), con pantalla gigantísima, con su equipo bailando y con la estrella del Mundial de dos ruedas convertido en protagonista desde la conferencia de prensa habida en la Universidad en la que, cómo no, prometió trabajar "¡y más duro si hace falta que este año!" para perseguir su séptimo título.

El monumento al ‘codito’

Es posible, sí, que la fiesta tuviera mucho de las cinco anteriores, incluido el camión de bomberos en el que circuló Márquez y su dream team. Incluso hasta hubo alguien que propuso que el ayuntamiento construyese una estatua del codo prodigioso, milagroso, de Márquez, el de las mayores salvadas de la historia. "No lo propongáis", pidió Márquez al comentarista de Catalunya Ràdio, que fue, en efecto, quien lo propuso, "pues mi gente es tan lanzada como yo y es capaz de sacarme un molde y colocar mi codito en la rotonda".

Márquez, que llevó la voz cantante en la fiesta, quiso maltratarse bailando, gritando y compartiendo con todos los suyos su sexto título, que apareció en un vídeo portentoso, narrado por el británico Nick Harris, que este año se jubila, y en el que reconoció que "con Andrea (Dovizioso) he vivido los momentos más divertidos y duros de los últimos años". El momentazo fue cuando Cesc Vila, el speaker de la fiesta, le propuso tumbarse en el escenario y demostrar cómo su codito logró la salvada del último Gran Premio de Valencia.

La gran ‘salvada’

Y, cómo no, Márquez agradeció a Honda haber compartido su apuesta del cambio de concepto de motor. "Honda hizo un gran trabajo y creyó en nuestra propuesta. Apostaron fuerte por  ir en la dirección que  que yo y mi equipo pensábamos y, aunque sufrimos al principio, al final ganamos. ¡Somos campeones!".

El nen de Cervera, ayer más que nunca, pues tuvo a todos sus vecinos postrados ante él y su dream team, confesó que "lo mejor de este 2017 fue Valencia, pero esa victoria fue una consecuencia de otros momentos importantes del año. Como el triunfo en Alemania, cuando logré ponerme líder antes de vacaciones, o Brno,  después del verano, que fue el punto de  inflexión. La gran cagada, por la que más me tiré de los pelos, fue Argentina. El exceso de ganas me llevó a cometer un error del que me arrepentiré toda la vida. ¡Ah! y me olvidaba: otro exceso de ambición fue intentar pasar a Zarco en Valencia. Provocó una salvada muy grande, de la que ahora reímos…".