Mucho más que móviles

Esta semana se ha celebrado una nueva edición del Mobile World Congress (MWC) en el recinto de L'Hospitalet de la Fira de Barcelona. Es uno de los salones más importantes que se hacen en el mundo y para nosotros representa una oportunidad. Para L'Hospitalet, el MWC es mucho más que móviles.

Las cifras hablan por si solas: 80.000 asistentes de 200 ciudades de todo el mundo, 3.000 periodistas acreditados, un impacto económico en el área metropolitana de más de 350 millones de euros y 7.000 puestos de trabajo temporales. Una cifras que reflejan el potencial económico del MWC, pero, también el  potencial de nuestra ciudad como colectivo.

El salón de la telefonía móvil es fruto del trabajo conjunto, de la colaboración entre Fira de Barcelona, los ayuntamientos de L'Hospitalet y de Barcelona, la Generalitat de Catalunya, el Ministerio de Industria, Energía y Turismo y el organizador, GSMA. Juntos hacemos posible que las empresas puedan ampliar horizontes, ya que MWC ofrece el escenario perfecto para que los delegados y las delegadas del salón intercambien y compartan conocimientos, de tal modo que se convierte en el embrión de nuevas oportunidades de negocio en un ámbito de la economía claramente en crecimiento.

Gracias a esta colaboración, y a las sinergias que se derivan de ella, L'Hospitalet, Barcelona, el área metropolitana, y Catalunya, ganamos en competitividad. La clave del éxito para futuros proyectos pasa por una política económica coordinada dentro del ámbito metropolitano  -el 67% del PIB de Catalunya se encuentra el área metropolitana. Solo así nos convertiremos en una gran economía, fuerte, potente. Si sumamos, si nos unimos bajo la marca Barcelona, creceremos.

Para crecer y salir de la crisis es esencial la formación, la investigación, la competitividad, la exportación y la inversión, que crearán ocupación y consumo. Si falta alguno de estos elementos el engranaje no estará bien lubricado. Nos falta mucho por hacer y hay que priorizar aquello que es bueno para la economía y que, además, puede tener un retorno social.

La línea 9 del Metro hasta el aeropuerto es un buen ejemplo. El mismo delegado general de GESMA, John Hoffman, lo escenificó bien el pasado miércoles cuando en un acto en L'Hospitalet los periodistas le preguntaron por la línea 9. Cogió un plano de L'Hospitalet y Barcelona y encima dibujó la estación de metro a la plaza de Europa de L'Hospitalet. La conectividad con el aeropuerto es fundamental.

Hay que aprovechar estas oportunidades para ganar proyección internacional, pero también, de la misma manera que con las infraestructuras hay que trabajar para que tengan un retorno social, más allá de los datos macroeconómicos.  Por ejemplo, las últimas semanas más de 500 personas  -gente mayor, jóvenes, estudiantes, trabajadores en paro, empresas y emprendedores- se han beneficiado de las actividades formativas relacionadas con las tecnologías del móvil que han tenido lugar en L'Hospitalet.

En resumen, ahora más que nunca tenemos que ser generosos, tenemos que pensar en el nosotros y no en el yo, y tenemos que hacerlo en clave económica pero también en clave social. Es necesario trabajar en el presente y, a la vez, encarar con valentía el futuro.