Blanca Sorigué: «Hay que buscar una solución a la necesidad de entrega inmediata»

El pasado 5, 6 y 7 de junio se celebraron, simultáneamente, la 20º edición del SIL Barcelona y la 2ª edición de eDelivery Barcelona Expo & congress, de las cuales Sorigué es la máxima responsable. Dos eventos donde se ha debatido sobre las últimas tendencias, tanto en la cadena de suministros como en las estrategias de entrega del e-commerce, poniendo énfasis en la industria y la economía 4.0

- ¿Qué es el e-commerce y la distribución última milla?

- El e-commerce es la venta online de bienes y servicios. Dentro del e-commerce, la logística es la base para poder entregar el producto al cliente final. Este cliente está concentrado en las grandes urbes, principalmente. Y aquí es donde entra la distribución última milla, es decir, el reparto dentro de la propia ciudad.

- Y el cliente es cada vez más exigente.

- Cuando hablamos de ventas online, lo que más valora el usuario es la entrega inmediata o a una hora determinada. Actualmente, existe un auge de negocios que intentan dar respuesta a esta exigencia. Por ejemplo, los puntos de recogida. Y aquí es donde entran las tendencias medioambientales y sostenibles, que se han estado debatiendo en el salón eDelivery Barcelona. Los últimos avances con más futuro son todas aquellas soluciones que tienen muy presente el impacto medioambiental.

- Las empresas deben adaptarse a sistemas de distribución más eficientes y menos contaminantes.

- En el salón se han podido ver las tendencias en este sentido. Por ejemplo tenemos el Scoobic, que es una empresa pionera en el reparto de última milla. Se trata de motos 100% eléctricas, con la capacidad de carga de una furgoneta comercial de 1.000 litros o 750 kg. Pueden aparcar prácticamente en la puerta del cliente; tienen acceso a las calles peatonales; son mucho más ágiles a nivel de tráfico y no ocupan espacio. Eso es importante porque cada vez se buscan vehículos más pequeños y sostenibles. Scoobic también tiene una vertiente social ya que incorporan un desfibrilador en caso de paro cardíaco. Y el vehículo está equipado con un electrofiltro que atrapa las partículas de polución del aire. Por todo esto ganó el Premio a la Mejor Innovación. 

- ¿Y el ganador del Premio a la Mejor Startup?

- Fue otorgado a la empresa Elioport por su propuesta para solucionar el problema de la entrega de la última milla con una flota de robots terrestres de autocarga y descarga. Estos robots viajarán en espacios públicos sobre pavimentos para cubrir la distancia entre el punto logístico final y el hogar del cliente. Se trata de máquinas autónomas que actúan como lo haría un mensajero. Estamos en la ciudad del futuro.

- ¿Cree que debería haber una mayor coordinación entre los municipios y las empresas en cuanto al transporte de mercaderías?

- Cuando hablamos de una distribución última milla estamos hablando de una distribución local. Cada ciudad tiene su normativa. En el área metropolitana de Barcelona se están dando pasos muy positivos, en los cuales intervienen distintos interlocutores, tanto públicos como privados, para intentar buscar una solución a una realidad que es que el cliente requiere una entrega inmediata. Eso es algo que no se puede cambiar. Somos nosotros quienes tenemos que adaptarnos al mercado. Creemos que tiene que haber una coordinación público-privada 100% y que para eso sirve un salón como el eDelivery o el SIL en el que realmente se potencien y se dé voz al sector privado y a los usuarios finales que son los que están marcando esta tendencia. Por ejemplo, la distribución nocturna que se propone desde la administración está muy bien, pero el cliente exige una entrega inmediata y eso quiere decir a cualquier hora, 24 horas.

- Qué demanda el sector privado a la administración?

- Más flexibilidad con las regulaciones, sobretodo. Y rapidez. Estamos hablando de que todas estas nuevas propuestas para hacer frente a los retos de una movilidad más sostenible en cuanto al transporte de última milla y al auge de las compras por Internet están viniendo de empresas startups. Como su propio nombre indica, son iniciativas empresariales que están empezando pero son súper ágiles y cuentan con una forma de captar capital mucho más rápida que cualquier otro negocio. Pero estas empresas necesitan probar su idea o producto en el mercado de la forma más inmediata posible. Esto significa que la administración local o supralocal también tiene que ser ágil a la hora de poner en marcha una regulación acorde con todos los actores.