Estercolero a 8.849 metros

El Everest rebosa de basura: "Hay más de 1.000 kilos de residuos" en el campo IV

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Un montañista nepalí denuncia la situación de la montaña más alta del mundo, donde se acumulan los desperdicios que dejan los grupos de turistas

El Everest se llena de basura

El Everest se llena de basura. En las imágenes, desperdicios y restos de expediciones acumulados en el campo cuatro del monte Everest. / BIDHAN SHRESTHA / REUTERS / VÍDEO: REUTERS

Reuters

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"Es desalentador ver la acumulación de basura en el campo IV en el Everest. Ya es hora de que abordemos este problema con urgencia y compromiso", denuncia el alpinista Tenzi Sherpa en un vídeo colgado en la cuenta de Twitter de @EverestToday, que informa del día a día de lo que pasa en la cima más alta del mundo. Lo que sucede es aberrante: kilos y kilos de residuos a 7.906 metros de altura. Botellas de oxígeno vacías, bombonas de gas, envases de todo tipo, bolsas de plástico, mantas isotérmicas, piolets y kilómetros de cuerdas, tiendas de campaña abandonadas... las imágenes son propias de un estercolero. Pero, ¿Quién deja tanta porquería sin una pizca de vergüenza? Los montañistas nepalís señalan a los responsables con el dedo: el turismo masivo para ricos.

Tenzi Sherpa explica en una entrevista de Reuters que él y su equipo han intentado limpiar la zona, pero ha sido imposible completar la tarea porque había "más de 1.000 kilos de basura". "Es triste e indignante. Bastante repugnante", denuncian los usuarios en la red social.

Entre 2016 y 2019 se duplicó el número de personas que suben cada año a la montaña por turismo. En este sentido, Nepal ha emitido un número récord de 454 permisos para coronar el Everest esta primavera. Se trata de la mayor cifra hasta la fecha, y que hace temer atascos en la cumbre más alta del mundo por la gran afluencia de alpinistas, algo que se ha vuelto recurrente en los últimos años y ha dejado estampas surrealistas.

La masificación es tal que la orina de miles de escaladores que intentan alcanzar los 8.849 metros de la montaña está derritiendo un glaciar situado en las inmediaciones del campo base. Los expedicionarios llegan a orinar hasta 4.000 litros al día, además de usar sistemas de calefacción, por lo que las autoridades nepalís han considerado trasladar el campamento a otro lugar más seguro para el medio ambiente.

Negocio de oro

Los numerosos grupos de turistas que suben con compañías organizadoras de viajes siguen sin recoger sus residuos. Tras más de 40 años de expediciones comerciales, hay numerosos proyectos para limpiar el Everest de basura. En la mayoría de ellos colabora el gobierno de Nepal, que recibe grandes ingresos del alpinismo: cada permiso para escalar la cima más alta del planeta tiene un coste de más de 10.200 euros, señalan los expertos del sector. Por su parte, China aplica restricciones en las autorizaciones para ascender el Montse Everest por la cara norte.

Las autoridades de ambos países recogen cada año unas 13 toneladas de basura del Everest y del cercano pico Lhotse como parte de una campaña para mantener limpias las cordilleras. Sin embargo, Tenzi Sherpa asegura que no es suficiente y defiende que las n compañías organizadoras de viajes deben recoger los residuos que generan.