Emergencia planetaria

Alerta científica: Solo quedan 9 años para salvar el clima

Hay un 50% de posibilidades de que el calentamiento de 1,5ºC, previsto para 2100, se alcance en realidad en 2031

Quedan 9 años para salvar el clima

Quedan 9 años para salvar el clima / Shutterstock

Joan Lluís Ferrer

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Más allá del reguero de nuevos compromisos y de la avalancha de informes que suelen dejar todas las cumbres climáticas, la COP27 dejó dos titulares especialmente llamativos, aunque parezcan contradictorios entre sí. Y es que hay dos noticias: una buena y la otra mala. La mala es que al planeta le quedan solamente 9 años para salvar el clima, acelerando de verdad el recorte de emisiones si no quiere rebasar en esa fecha el calentamiento ‘extra’ de 1,5ºC que, en teoría, no debería alcanzarse hasta 2100. La noticia buena es que, pese a todo, tres de los grandes contaminadores mundiales (China, India y Europa) avanzan hacia la descarbonización más rápido de lo previsto.

El informe dado a conocer por Global Carbon Project, un reconocido panel mundial con más de 100 científicos que estudia el impacto del carbono sobre el clima global, ha dado una idea clara de cómo están las cosas. En resumidas cuentas, según dicho estudio, hay un 50% de posibilidades de que dentro de 9 años se rebase la fatídica cifra de los 1,5ºC de calentamiento respecto a la era preindustrial. Ese horizonte estaba fijado para 2100, pero no para la próxima década, lo que no hace sino empeorar mucho los pronósticos.

Que haya la mitad de posibilidades de que esa subida se adelante tanto es prácticamente jugar a la ruleta rusa, concluyen los expertos, que apuestan por emprender acciones “radicales e inmediatas” para que no nos toque la bala en ese fatídico juego.

Las emisiones aumentan en 2022

De hecho, los últimos datos conocidos sobre calentamiento no reman precisamente a favor del planeta. En 2021 las emisiones rebotaron tras el paréntesis de la pandemia, y había gran expectación por saber qué pasaría en 2022. Pues bien, las estimaciones de Global Carbon Project apuntan a que el presente año terminará con una nueva subida de las emisiones de CO2, en concreto de un 1% respecto a 2021. Puede parecer poca cosa, pero cuando se esperan reducciones inmediatas y drásticas, cualquier aumento equivale a una derrota.

Emisiones mundiales

Emisiones mundiales / Global Carbon Project

El culpable de este aumento en 2022 es el auge en el uso del petróleo (sus emisiones suben un 2,2%) y del carbón (un 1%), porque las causadas por el gas bajan un 0,2% y las derivadas del uso del cemento, un 1,6%. Todos los expertos coinciden en que el repunte de la aviación tras la pandemia es uno de los grandes responsables de este 1% de subida global en las emisiones en 2022.

¿Cómo se sabe que nos quedan nueve años para llegar a la subida de 1,5ºC? Fundamentalmente, Global Carbon Project tiene en cuenta el número de gigatoneladas de CO2 que se lanzan a la atmósfera anualmente. Dado que la humanidad alcanzará el calentamiento de 1,5ºC en cuanto se lancen otras 380 gigatoneladas de CO2 y solo en 2022 se habrán emitido 40,6, es fácil calcular cuándo se agotará esa ‘reserva’ de dióxido de carbono que aún puede lanzarse antes de llegar al fatídico límite establecido por el Acuerdo de París.

Misión casi imposible

Los autores del informe consideran poco probable que puedan frenarse las emisiones en la medida requerida en tan poco plazo. De hecho, para llegar a 2100 con un calentamiento de ‘solo’ 1,5ºC sería necesario que cada año hasta entonces hubiera descensos parecidos a los que se registraron durante la pandemia del Covid en el año 2020.

“No tenemos un crecimiento verde una vez superado el Covid. Seguimos teniendo un aumento alimentado por el uso de combustibles fósiles”, constata el miembro de Global Carbon Project Philippe Ciais.

Por su parte, el director ejecutivo del Global Carbon Project e Investigador Jefe del centro de Ciencias del Clima CSIRO en Canberra (Australia), Pep Canadell, fue bastante claro en un reciente encuentro con periodistas: el mundo se dirige hacia el calentamiento de 2,4ºC a final de siglo. La diferencia entre 1,5ºC y 2,4ºC puede ser abismal, según todos los estudios científicos, que dibujan un panorama realmente desolador en el segundo supuesto. Y, sin embargo, parece ya el más probable.

Refugiados climáticos

Refugiados climáticos / Shaiful Huq Omi

De continuar la emisión de carbono a la atmósfera al actual ritmo durante los próximos cuatro o cinco años, el planeta superará los 2ºC. “Vamos directos hacia este escenario, incluso de más de 2,4º”, aseguró. Y añadió que los fenómenos climáticos extremos actuales anticipan ya el futuro: «Los extremos climáticos ahora van más allá de lo que habíamos pensado. Quizá no hemos imaginado bien cómo será un mundo con 2º de más», alertó Canadell.

Ciertos destellos de esperanza

Pero ¿no hay noticias positivas a las que agarrarse? Las hay. Por una parte, el aumento de las emisiones no se detiene, pero está ralentizándose. Si durante la década de 2000 subía a un ritmo anual del 3%, en la última década ya solo lo hace al 0,5%. Y, por otra parte, tres de los grandes emisores de CO2, China, India y Europa, están en la senda de alcanzar sus objetivos de descarbonización antes de lo que inicialmente habían previsto en sus objetivos nacionales.

Otro informe, este difundido por The Energy and Climate Intelligence Unit (ECIU) y que coincide con otros similares, detalla que China está dando un impulso impresionante a las energías limpias, por lo cual las emisiones bajarán en 2022 un 0,9%. Sin embargo, hay otros factores involucrados, como la ralentización de su economía y el elevado ritmo de reforestación que está llevando a cabo el gigante asiático.

También en India las renovables están asistiendo a un fenomenal despegue. Y, aunque este país sigue siendo muy dependiente del carbón (las emisiones indias en 2022 suben un 6% respecto a 2021), se espera que dentro de esta misma década se observen reducciones de tal calibre que den la vuelta a la tortilla, quedando el carbón como marginal frente a las renovables.

La tercera potencia industrial con reducciones significativas, la Unión Europea, verá bajar en 2022 sus emisiones un 0,8%, sobre todo por la caída del gas en un 10%, vinculada a la guerra de Ucrania.

Turbinas eólicas en el mar

Turbinas eólicas en el mar / Shutterstock

En Estados Unidos, sin embargo, aumentarán un 1,5%, impulsadas por el aumento del consumo de gas, utilizado para desembarazarse del carbón. Pero EEUU es ahora mismo el segundo país, después de China, que más invierte en energía solar y eólica, hasta el punto de que para 2030 generará el 85% de su energía mediante renovables.

El informe de ECIU considera que “las rápidas reducciones en los precios hacen que la energía eólica y solar sean ahora mucho más baratas que los combustibles fósiles”, hecho este que anima a muchos gobiernos e inversores a remar en esa dirección.

“El margen de tiempo se estrecha”

Ahora bien, pese a estos destellos de esperanza, los expertos subrayan que “el margen de tiempo se está estrechando”. Ya no bastan las esperanzas prometedoras o los compromisos para el futuro, sino medidas concretas e inmediatas, y de calado.

La Agencia Internacional de la Energía (IEA, en inglés) daba a conocer el mes pasado su previsión de que los combustibles fósiles alcanzarán su pico máximo de consumo en el año 2030 y a partir de ahí, empezará a bajar para ser reemplazados por las renovables. Pero la desaparición de los hidrocarburos no será abrupta y repentina, sino que será una reducción lenta y paulatina, que aún causará un gran volumen de emisiones a la atmósfera durante muchos años.

De ahí que la visión de conjunto sobre la situación arroje más sombras que luces sobre el futuro de la humanidad a medio plazo.

Informe íntegro de Carbon Global Project:

https://essd.copernicus.org/articles/14/4811/2022/

Informe de ECIU:

https://eciu.net/analysis/reports/2022/the-big-four-are-major-emitters-downplaying-their-climate-and-clean-energy-progress

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Contacto de la sección de Medio Ambiente: crisisclimatica@prensaiberica.es