BIODIVERSIDAD COSTERA

El viejo pantalán de la térmica de Sant Adrià se preservará como arrecife para la fauna marina

Las estructuras submarinas de hormigón, abandonadas desde hace décadas, han sido colonizadas por más de 500 especies animales

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ANTONIO MADRIDEJOS / BARCELONA

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Los restos del viejo pantalán de la central térmica de Endesa en Sant Adrià de Besòs, abandonados desde hace décadas en el fondo del mar, se convertirán en unos arrecifes artificiales que favorecerán el desarrollo de la fauna marina, según han acordado la empresa eléctrica, los dos ayuntamientos directamente afectados (Sant Adrià y Badalona) y el Consorcio del Besòs. El objetivo final del plan es la recuperación integral de este espacio que los pasados usos industriales "degradaron medioambiental y paisajísticamente", como subrayan los cuatro firmantes del convenio de colaboración.

El viejo pantalán de Endesa, formado por diversas tuberías submarinas de hormigón, se construyó en 1913 como sistema para captar agua de refrigeración para la central centrar térmica y así funcionó hasta que en 1953 se construyó un nuevo equipo. Con el paso del tiempo, las estructuras fueron degradándose poco a poco, pero nunca fueron retiradas del agua.

La sorpresa llegó en fechas recientes, tras el cese de actividad de la central térmica. Durante el desmontaje del nuevo pantalán, el año pasado, se observó que las viejas tuberías, totalmente rotas, acogían una gran diversidad de especies y estaban potenciando una recuperación del fondo marino. "Están muy bien colonizadas -resume Antoni Alarcón, gerente del Consorcio del Besòs-. La naturaleza no es tonta. Si le ayudas con estructuras de apoyo, con sitios donde haya agujeros, las larvas prosperan". Así que los técnicos de la entidad consideraron la necesidad mantener las viejas estructuras y proteger la zona.

RIQUEZA DEL BIOTOPO MARINO

Entre las especies que se encuentran incrustadas o viven en las estructuras existentes hay algas pardas y calizas y más de 500 especies animales. Destacan esponjas, hidroideos, briozoos, poliquetos, crustáceos como cirripedios e incluso colonias de tunicados. Como fauna móvil se pueden observar estrellas de mar, erizos y gran diversidad de crustáceos, además de numerosas puestas de moluscos, pulpos y sepias. En cuanto a los peces, finalmente, se han observado escórporas, vaguetas, castañuelas, doncellas, momas, podas, doradas, serranos y besugos, entre otros. "La calidad del agua es buena", insiste el gerente del Consorcio del Besòs.

Los ayuntamientos han propuesto también dejar el bloque de hormigón que constituía el cabezal de los tubos de refrigeración como una isla para que puedan posarse las aves marinas. Alarcón destaca que en él se han observado especies poco habituales como la gaviota de Audouin y el cormorán moñudo. 

Endesa retirará los elementos metálicos y otros materiales que no son interesantes y puedan molestar a los submarinistas. Además, para no interferir con los bañistas, todas las estructuras que se mantengan deberán estar al menos a dos metros y medio por debajo del agua. Según el convenio, la finalidad de este proyecto no solo será la conservación del medio marino, sino la de promover también otras actividades de ocio y de educación ambiental. "En un mes presentaremos el proyecto, que incluye también un programa de seguimiento biológico", comenta Alarcón.

El Consorcio, en nombre de los ayuntamientos implicados, solicitará la concesión administrativa de la parte de dominio público marítimo terrestre que constituirá el futuro parque de arrecifes. Endesa, que ha financiado el proyecto técnico, destinará una partida económica para colaborar en acciones de vigilancia.