Un pequeño panda del zoo de Madrid se asoma por primera vez al exterior

Con 7 meses y unos 15 kilos de peso, la cría de oso panda gigante Xing Bao --cuyo nombre significa 'Tesoro de estrella'-- tiene ya más autonomía, flexibilidad y capacidad para trepar que en su presentación al mundo del pasado mes de noviembre, lo que este miércoles le ha permitido superar su timidez para explorar por vez primera la pradera exterior del zoo de Madrid.

Entre los flases de las cámaras y las miradas atentas de los embajadores en España de China y Estados Unidos, Xing Bao, la cuarta cría de oso panda gigante de Zoo Aquarium de Madrid, tras Chulín y los gemelos Po y De De, ha abandonado la zona cubierta en la que hasta ahora vivía para estrenar su nueva zona de entretenimiento.

Su madre, Hua Zui Ba, ha sido la primera en salir a la pradera para abrir camino a Xing Bao, quien se ha dejado ver tímidamente y se ha subido a una de las numerosas plataformas de su zona de juego, desde la que ha empezado a explorar el resto de la pradera.

Expresión de los cuidadores

Al ver cómo la cría de oso panda gigante exploraba toda la pradera exterior, uno de sus cuidadores, como si de su propio hijo se tratara, ha comentado orgulloso: "Mira el enano, nunca ha sido tan valiente como hoy [por este miércoles]".

Antes de salir a jugar a la pradera exterior, explica María del Claux, conservadora de mamíferos terrestres del Zoo Aquarium de Madrid, Xing Bao tenía que desarrollar "perfectamente" toda su capacidad para trepar y, especialmente, para bajar, ya que subir "normalmente es más fácil".

Este desarrollo lo ha conseguido gracias a la leche de su madre, que le ha alimentado desde que nació el pasado 30 de agosto y lo ha convertido en un osezno "fuerte" y "juguetón", según relatan fuentes del zoo.