El nuevo depósito de Ronda Bellavista de Mataró optimiza el abastecimiento de agua de la ciudad

La lucha por la gestión del agua, en estos momentos y en una zona como Catalunya, una vez que llega a una ciudad como Mataró, no es solo para obtenerla sino más bien para tratar de gestionarla lo mejor posible, del modo más eficiente. El quid de la cuestión es ser capaces de guardar cuanta más agua mejor en el mayor número de depósitos posible, en previsión de una avería en el sistema o de la sequía, un fenómeno que justamente en los últimos tiempos llama de nuevo a nuestra puerta a pesar de que la insistente lluvia que cayó durante todo el fin de semana en la capital del Maresme haya mitigado un poco esta sensación.

Hasta el momento en Mataró había un total de catorce depósitos propiedad de Aigües de Mataró, la compañía municipal –aunque formalmente de titularidad privada- que justo este 2022 cumple cien años de funcionamiento. Uno de ellos, el del Primer de Maig (en el barrio de Molins-Torner), se había quedado pequeño, puesto que “solo” tiene 3.000 metros cúbicos de capacidad. Pero éste es justamente el que ahora abastece el sector más importante en extensión, consumo y número de abonados, la zona del Centre, el Eixample y el Pla d’en Boet. Si este depósito hubiera fallado, la situación sería crítica.

Ante esta situación, y enmarcados en la reflexión inicial de buscar la máxima eficiencia en la red, el Pla Director de l’Aigua de Mataró redactado en 2018 por Aigües de Mataró señaló la necesidad de construir un nuevo depósito en una zona de más altura y se decidió situarlo justo en la entrada oeste de la ciudad, en la Ronda Bellavista, en el barrio de Cerdanyola.     

Ahora ya es una realidad: desde el pasado 8 de marzo este nuevo depósito, el tercero en capacidad -6.677m3- de la ciudad, ya está en pleno funcionamiento en la zona dels Garrofers del barrio y este lunes -14 de marzo- la corporación municipal con el alcalde al frente quiso visitarlo y hacerlo público a través de los medios.

Era un momento importante, después de cuatro años de trabajos –desde el marzo de 2018, acumulando varios retrasos- y muestra de ello es que acompañaron a David Bote hasta cinco concejales de su gobierno (3 del PSC y 2 de En Comú Podem) y el jefe de la oposición, Francesc Teixidó (ERC). Las obras al final han costado 8 millones de euros y no los 6,7 previstos e incluyen la urbanización de un parque de 12.000m2 que se convertirá en el pulmón verde de Cerdanyola, largamente ansiado en el barrio.

"Una instalación más resiliente"

“Hoy es un día importante. Hablamos de un espacio equivalente a 2,6 piscinas olímpicas, que da servicio a la parte sur de la ciudad y que hace más robusta la red de agua de abasto de agua potable. Trabajamos con la eficiencia, en hacer más y mejor gestión, para conseguir que si el agua no llega por un conducto, llegue por otro. Para que el sistema sea más resiliente, como se dice ahora”, bromeó el alcalde David Bote, en una de las primeras inauguraciones de una primavera que se prevé relevante en este sentido.

La urbanización del nuevo Parc dels Garrofers –lleno de algarrofas, claro está- y la puesta en marcha del nuevo depósito de agua, que funciona des del 8 de marzo, se celebrará este domingo -20 de marzo- a partir de las once de la mañana, si el tiempo no lo impide. Es decir, si no llueve nuevamente otro fin de semana y el depósito de la Ronda Bellavista sigue llenándose.

Previsión de un nuevo depósito en el Sorrall

El agua que gestiona este nuevo depósito de la Ronda Bellavista proviene del sistema Ter-Llobregat, que representa un 79% del total que se usa en la ciudad. Respecto el 21% restante, precisamente, el alcalde no dejó pasar la ocasión para, girándose 180 grados e indicando la zona del Sorrall que queda al lado del popular equipamiento deportivo, señalar el lugar donde debería ir otro depósito que tendría como función mejorar la captación de las aguas propias de la zona, provenientes de las fuentes de Argentona.

Este proyecto se intentará financiar vía una convocatoria del fondo Next Generation y se enmarca dentro de la política de Aigües de Mataró –y por lo tanto del Ayuntamiento- de trabajar a fondo las cuestiones de sostenibilidad en la zona Garrofers-Sorrall.

La inauguración del depósito de Ronda Bellavista, pues, es solo un peldaño más en la lucha para garantizar el acceso a agua corriente y para hacerlo de la forma más eficiente posible. 

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